Víctor Quintero, El «Patriarca de las Esmeraldas», el hombre que le sobrevivió a Carranza

Compártelo:

Este es el nuevo libro del escritor y periodista investigativo santandereano  Alfredo Serrano Zabala.

PRÓLOGO 

Hola. ¡Mi papá acaba de morir!

Este lacónico mensaje llegó a mi celular, vía whatsapp, a las 5 y 49 minutos de la tarde, del domingo 26 de julio de 2015. La noticia provenía de Wilson Quintero Ruiz, el hijo menor de  Víctor Manuel Quintero Morales, el llamado “Patriarca de las Esmeraldas”.

Víctor Quintero, como se le conocía a secas,  había nacido el 30 de octubre de 1930, en el municipio de Somondoco al oriente del departamento de Boyacá, en el centro de Colombia.

El deceso del curtido hombre de las esmeraldas se produjo  a las 5 y 30 minutos de la tarde de ese sosegado domingo en la clínica Reina Sofía, ubicada en el nor oriente de Bogotá. Quintero Morales había ingresado al centro hospitalario, quince días antes, tras sufrir un accidente cerebro vascular, anomalía que no pudo superar a sus 84 años de edad.

El cuerpo de Víctor Quintero fue velado en la funeraria Gaviria, ubicada en la calle 98  # 17 A – 20 de la capital de la república. La misa de cuerpo presente se llevó a cabo en la Iglesia Cristo Rey, de donde fue conducido hacia el cementerio Jardines de El Recuerdo al norte de la metrópoli.

A la velación del cuerpo del ducho minero llegaron esmeralderos de todos los sectores y estratos sociales, desde los multimillonarios y poderosos –algunos temibles- hasta los guaqueros más humildes quienes rindieron tributo a la memoria del Patriarca, frente a su viuda; Ana Elvira Ruiz y a su vástago Wilson Quintero.

Ana  Elvira la enlutada, muy compungida por la partida de su esposo, hombre al que acompañó por más de 50 años, compartió su dolor, en la sala de velación,  en compañía de varias damas. Entre ellas, sentada muy cerca a la viuda de Víctor Quintero, se hallaba otra matrona, cuyo cabello sobresalía por su textura color violeta suave, se trataba de la señora Blanca viuda de Carranza, esposa del ex «zar» de las esmeraldas Víctor Manuel Carranza Niño, fallecido el 4 de abril de 2013, víctima de un cáncer.

Las viudas de los Víctor Manuel, los tocayos  más poderosos del mundo de las esmeraldas, Ana Elvira (Víctor Quintero) y Blanca (Víctor Carranza), por años trabaron una respetada y admirada amistad, no obstante las serias disputas que, en vida, mantuvieron  sus esposos, diferencias que incluso obligaron  a Víctor Quintero  en 1989, a exiliarse un par de años en Estados Unidos, huyendo de Carranza para salvar su pellejo  y el de dos de sus hijos varones, Germán y Wilson.

El comunicador Alfredo Serrano presenta su libro: «Víctor Quintero, El Patriarca de las Esmeraldas».

Desde niño, Víctor Quintero se dedicó  a trabajar en las minas de esmeraldas de Chivor, allí conoció los secretos de la dura faena, labor que al momento de su muerte, le confería el honor de ser el esmeraldero más antiguo de Colombia, el «Patriarca de las Esmeraldas» oficio del que nunca se apartaría y donde, pese a su hogareño retiro, en el sector lo seguían considerando uno de los esmeralderos más poderosos del país y del mundo.

El “Patriarca de las Esmeraldas” fue  un férreo defensor y propulsor de la paz, en medio del clima de guerra, que siempre ha rondado  el multimillonario negocio de las  gemas que cataloga,  las esmeraldas colombianas, como las más finas del mundo.

Víctor Quintero, era según  sus familiares y amigos, un hombre recio, pero de carácter noble, quién tenía como lema: “La paz por encima de todas las cosas”.

«Fue un hombre creyente, con fe insuperable afianzada de la mano de  «Papá Dios». Su partida dejó un profundo dolor en la familia Quintero, así como entre sus amigos quienes lo recordarán por siempre”; escribiría, horas después de su fallecimiento a través de las redes sociales, Wilson, su heredero directo en el trabajo de las esmeraldas. Los demás hijos e hijas que le sobreviven al minero se dedican a diferentes  labores profesionales, ajenas al mundo verde.

“Murió el patrón de Víctor Carranza. El poderoso esmeraldero Víctor Quintero falleció de un derrame. Sus herederos disputan mina”. Así registró, en primera página el periódico El Tiempo, el lunes 27 de julio de 2015,  la desaparición del esmeraldero del oriente del departamento de Boyacá. “A los 84 años de edad, falleció en la noche del domingo en una clínica de Bogotá el esmeraldero Víctor Manuel Quintero Morales, el único patrón que tuvo el «zar» de las esmeraldas Víctor Carranza. Si bien, Quintero expiró de muerte natural -un derrame cerebral-, las autoridades están en alerta porque sus herederos se están disputando una de las mejores minas ubicadas en Chivor (Boyacá).” arguyó  el periódico bogotano de circulación nacional.

El Tiempo en su nota póstuma concluye advirtiendo: “Tal como lo reveló EL TIEMPO en febrero, sus hijos le aseguraron a la Unidad de Víctimas de la Presidencia de Colombia que fueron desalojados a finales de los 80 por hombres armados. Además, denunciaron que la mina viene siendo explotada por una empresa privada sin tener los derechos.

De hecho, ya fueron aceptados como víctimas y el caso está en revisión, a pesar de que la empresa San Francisco, quien explota la mina, ya advirtió que ésta les fue adjudicada legalmente por el Estado y que la posesión del terreno les fue entregada dentro de un proceso de pertenencia por un juez de Guateque (Boyacá)».

Por su parte, la influyente emisora W Radio, a propósito de la muerte de Víctor Quintero titularía: “Falleció el Patriarca de las Esmeraldas, Víctor Quintero. El empresario fue reconocido por mantenerse al margen de la Guerra Verde y por fomentar el diálogo y la paz en el occidente del departamento de Boyacá”.

La W añadió: “hace más de siete décadas el llamado «Patriarca de las Esmeraldas» y único patrón que tuvo el «Zar» Víctor Carranza, como muchos campesinos de la región, entró en los socavones y salió de ellos con una inmensa fortuna, que le permitió comprar en las décadas del 70 y 80, varias tierras en zonas de explotación minera. 

Entre las propiedades que adquirió están 23 predios que reunidos sumarían unas 900 hectáreas, todas ellas ubicadas en las minas de Chivor y sus alrededores. Tras amenazas, los Quintero mantuvieron cierta distancia en la guerra entre esmeralderos y salieron de sus propiedades en 1989 para refugiarse fuera del país”.

El minero artesanal Henry Candela, presidente de la Asociación Integral de Mineros Tradicionales de Peñas Blancas, asociación a la que Víctor Quintero les regaló y parceló 45 hectáreas en octubre de 2014, le dijo a La W: “Lamento el fallecimiento de don Víctor, una persona que de verdad vino a servir al occidente, al sector minero esmeraldero. Fue una persona noble y justa”.

La historia destaca que fue el esmeraldero Víctor Quintero quien apoyó e impulsó en el mundo de la minería a Víctor Carranza el fallecido “Zar” de las esmeraldas, de quién en voz baja se indica  entre los esmeralderos, que en su afán de convertirse en el dueño y señor del opulento negocio olvidó que Quintero le había dado la mano y, por el contrario,  arremetió contra su colega  a tal punto de obligarlo a salir del país para poder preservar su vida.

De Víctor Quintero,  también se recordó que había donado los terrenos para la construcción de colegios como  en la región de Palomas, donde los niños de la vereda acceden hoy a  educación básica.

Por Alfredo Serrano Zabala 

Compártelo:
La Otra Cara
La Otra Cara

La Otra Cara es un portal de periodismo independiente cuyo objetivo es investigar, denunciar e informar de manera equitativa, analítica, con pruebas y en primicia, toda clase de temas ocultos de interés nacional. Dirigida por Sixto Alfredo Pinto.


Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *