Luego de una dura batalla jurídica del abogado Abelardo De La Esperiella, la justicia le impuso a la exbailarina y a su ex abogado Arcadio Martínez, una pena de seis años y medio de cárcel por sobornar al exparamilitar Don Antonio para que cambiara su versión, donde la señalaba de ser quien ordenó el asesinato del ganadero Fernando Cepeda.
Aquella famosa bailarina argentina que usaba lentejuelas, trajes brillantes y plumas para adornar su armonioso cuerpo, que llegó a Colombia por Cartagena, en la década de los 80, hace años que dejó de ser una sensual vedette para convertirse en una de las protagonistas principales de las historias oscuras judiciales que siguen los medios de comunicación en nuestro país. Es la bonaerense Silvia Beatriz Gette Ponce, ahora condenada dentro de un proceso penal que encierra homicido, enriquecimiento ilícito, desfalco, paramilitares, lavado de activos, amenazas de muerte y sobornos.
La rubia deslumbró, a mediados de los 80, haciendo show de striptease con la compañía musical de Pepe Bronce, al fundador y entonces rector de la Universidad Autónoma del Caribe, con sede en Barranquilla, Mario Ceballos Araújo, con quien comenzó una estable relación sentimental y con el paso del tiempo logró tener el control administrativo total de la misma como la esposa del célebre dueño.
Empezaron ha existir rumores entre la ciudadanía de malos manejos de los dineros de la Universidad y otras irregularidades en esa institución que no pasaron a mayores, pero la historia se complicó cuando los paramilitares, de moda en la época, asesinaron en Barranquilla al yerno de Ceballos, el ganadero y arquitecto Fernando César Cepeda Vargas, el 22 de agosto de 2003.
Según María Paulina Ceballos Pardo, hija de Mario Ceballos y esposa de Cepeda Vargas, el sacrificado empresario que era muy querido en la capital de Atlántico, no tenía líos con nadie y con la única que mantenía serias discrepancias era con su madrasta Silvia Gette, que lo consideraba como su peor enemigo porque la enfrentó por sus extraños manejos y «despilfarro de dineros» al frente de la Universidad. Se hablaba de cifras superiores a los 18 mil millones de pesos malversados.
«Fernando era un hombre sin problemas. Un intelectual y un ser humano excepcional. La única enemiga que tuvo en su vida fue Silvia Gette», afirmó Ceballos al diario barranquillero El Heraldo.
Sin embargo, el detonante que hizo poner a la ex vedette argentina en el ojo del huracán fue el sorpresivo deceso de su marido, el veterano ex magistrado del Tribunal Administrativo del Atlántico Mario Ceballos, en octubre de 2003, quien, según Medicina Legal, murió en forma violenta por intoxicación con mercurio. Esto, convirtió a Gette en la nueva rectora y la persona con más poder en la Autónoma hasta el 2012, además, los cuantiosos recursos de las ganancias del lucrativo negocio irían sólo a sus arcas.
Al principió, hasta María Paulina fue inculpada por el fallecimiento de su millonario cónyuge Cepeda, pero decidió enfrentar a la ex bailarina, para llegar a la verdad del asunto, de la mano del prestigioso abogado Abelardo De La Espriella y su oficina de la que hace parte el jurista Wilson Caballero.
Al mes de la muerte de su esposo, Ceballos fue a la Fiscalía a preguntar sobre el tema y el Fiscal encargado le manifestó que el expediente se encontraba cerrado y “que no había nada que hacer”.
«En Barranquilla reinaba el temor por Silvia Gette. No había abogado o funcionario Judicial que se atreviera a confrontarla pero, apareció en nuestras vidas el abogado De La Espriella», manifestó Ceballos.
10 años de impunidad
De La Espriella se dio a la tarea de desenredar el caso y en el transcurso del proceso logró, en el 2015, la detención preventiva de Gette por la muerte del reconocido ganadero, 12 años después del hecho, luego de haber conseguido que el caso fuera trasladado a Bogotá en el 2012.
“Este se encontraba engavetado, no había nada. Pero hoy se ha logrado enviar a Bogotá a una Fiscalía especializada en antiterrorismo, se han practicados todas las pruebas, y estamos frente a una próxima decisión a favor de las víctimas, porque lo importante son las víctimas porque ellas tienen derecho a la verdad a la justicia y a la reparación”, explicó De La Espriella en su momento a los medios, quien renunció a la defensa de Ceballos en noviembre de 2014.
Abelardo De La Espriella / eluniversal.com.co
A Cepeda lo asesinaron unidades de Édgar Ignacio Fierro Flórez, alias Don Antonio, jefe del extinto Frente José Pablo Díaz de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y era el hombre de confianza en Barranquilla del máximo líder de la organización criminal en la Costa Caribe, Rodrigo Tovar Pupo, alias Jorge 40.
Don Antonio, ahora vinculado a la Ley de Justicia y Paz, acusó a Gette en el 2011, dentro de este programa, de ser la autora intelectual de crimen de Cepeda, lo cual no se le ha comprobado aún, y siempre la ha tildado de “muy peligrosa”.
Otro exparamilitar bajo su mando, Jhonny Acosta Garizábalo, alias 28, también ha señalado en versiones de Justicia y Paz, a Gette como autora intelectual del homicido agavado del ganadero y dice temer por la seguridad de sus familiares.
Según la Fiscalía, “a Silvia Gette le convenía callar a Cepeda”, además se demostró «la existencia de amenazas en contra de la víctima (Cepeda), quien además venía percibiendo seguimientos, acosos y violaciones a su intimidad por la inserción de micrófonos destinados a conocer sus movimientos, los cuales atribuyó públicamente a la procesada Gette Ponce, manifestando temor por su vida y la de su compañera (María Paulina)».
El soborno a Don Antonio
La Jueza 34 Penal del Circuito de Conocimiento de Bogotá emitió fallo condenatorio contra la exrectora de la Universidad Autónoma del Caribe, Silvia Gette, en el proceso que se le siguió por el delito de soborno en actuación penal. Este expediente se desprendió de la investigación por la muerte de Capeda.
Para ese despacho judicial, que funciona en el Complejo de Paloquemao en la Capital de la República, existen pruebas que permitan demostrar que la exbailarina gaucha ofreció 500 millones de pesos al exjefe paramilitar para que cambiara la versión donde la vinculaba con el homicidio de Cepeda.
El propio Don Antonio denunció el soborno del abogado Arcadio Tobías Martínez Pumarejo, abogado asesor de Gette, detenido tras un operativo del CTI de la Fiscalía, el pasado 10 de febrero de 2013 en el centro comercial Buenavista de Barranquilla, donde fue capturado en flagrancia cuando entregaba 249 millones 450 mil pesos, a nombre de la exrectora, a un intermediario de Fierro para que este cambiase su versión sobre el homicidio de Cepeda. A comienzos de enero de 2015 Martínez Pumarejo fue dejado en libertad por la Jueza 34 con funciones de Control de Garantías de Bogotá por un supuesto vencimiento de términos, luego de 14 intentos fallidos del jurista por conseguir su salida.
La Fiscalía acusó en el juicio a Gette de haber ofrecido un total de 1.000 millones de pesos, por intermedio de su abogado Arcadio Martínez, a Don Antonio para que este rectificara su versión de que la exrectora organizó el plan para asesinar a Cepeda, e inculpar a María Paulina Ceballos. “Lo querían convertir en un testigo de oídas”, dijo tajantemente la representante del ente acusador en el caso.
500 de esos 1.000 millones, eran para vincular al jurista Abelardo De La Espriella y a otro abogado de su firma, de nombre Daniel Peñaredonda, dentro del proceso penal por homicidio como las personas que había indicado a Don Antonio que se mantuviera en la versión de Justicia y Paz, en la que señalaba a Gette como determinadora del asesinato de Cepeda.
“Quedó demostrado, por los testimonios que la Fiscalía presentó contra Silvia Gette Ponce, que se estaban ofreciendo dineros para alterar el proceso”, agregó la investigadora.
Por todo lo anterior, la Jueza 34 Penal del Circuito de Bogotá con funciones de Conocimiento condenó a Gette y a Martínez a seis años y medio (78 meses) de prisión. Ella, como determinadora del soborno, y él, como el autor material del delito. A la exrectora le negaron la libertad condicional y le concedieron la prisión domiciliaria, pero no puede salir de la cárcel porque tiene medida de aseguramiento como determinadora del homicido de Cepeda, que se sigue en la Fiscalía 10 de Derechos Humanos.
La plata de la Universidad para delinquir
De acuerdo con Abelardo De La Espriella, Silvia Gette pagó los crímenes con la plata de la Universidad.
«No nos quepa la menor duda de que Gette pagó con dineros de la Universidad tanto el asesinato de Fernando Cepeda, unos 150 millones de pesos, como el soborno a Don Antonio a través del abogado Arcadio Martínez por 500 millones», ratificó el reconocido jurista.
Al tiempo que denunció amenazas de muerte contra él y María Paulina Ceballos: «Aunque Gette sigue detenida, muchos de sus amigos y familiares intentan amedrentar a las víctimas para que no se conozca la verdad: el señor Guillermo Gette, hermano de Silvia, se la pasa lanzando amenazas que han llegado hasta nuestros oídos. Desde ya lo responsabilizo por cualquier cosa que le suceda a María Paulina Ceballos (esposa de Cepeda), María Fernanda Cepeda (hija de Cepeda) o al suscrito».
El ex sacerdote que enreda a la ex bailarina
El exsacerdote José Benito Cadrazco le entregó a un grupo de abogados la primera versión contra Silvia Gette, la cual fue radicada ante notario público para certificar su autenticidad. Esa grabación inédita, al principio fue denunciada como extraviada, pero apareció y quedó introducida en el proceso. La cinta es considerada como la ‘prueba reina’ contra la exbailarina.
En la grabación se le escucha a Cadrazco narrar cómo la ciudadana argentina y Fernando Cepeda se enemistaron por las constantes denuncias de este debido a los malos manejos administrativos en la Autónoma y narra también que la exrectora se alió con el exjefe de sistemas del centro educativo, el ahora prófugo Juan Carlos Rada, para supuestamente cometer el crimen del ganadero en 2003.
La cinta fue publicada en exclusiva por elherlado.co y la puede escuchar completa AQUÍ.
Silvia Gette está detenida en la prisión de El Buen Pastor de Bogotá, a órdenes de la Fiscalía 10 Especializada de Derechos Humanos, mientras su abogado Arcadio Martínez si puede disfrutar de la casa por cárcel con un brazalete electrónico. No obstante, se dice que la exvedette de Buenos Aires, quien habría pensado fugarse a su natal Argentina, está tranquila, porque goza de una inmensa fortuna en millones de dólares en el exterior, producto de su administración en la Autónoma.
