«Hacer la paz exige sacrificar ilusiones»

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‘HACER LA PAZ DESPUÉS DE QUE LAS DOS PARTES NO PUDIERON GANAR LA GUERRA EXIGE SACRIFICAR ILUSIONES’

Este país parece tener memoria de gallina. No fue sino que el presidente Santos dijera que consideraba la posibilidad de volver policías rurales a los guerrilleros para que se rasgaran las vestiduras y arremetieran contra la idea.

Como ya no se enseña historia en los colegios y la memoria de Google no alcanza sino para calmar la pereza de tenerse que leer un libro, los colombianos de hoy no saben que con guerrilleros del Llano se montó en 1953 el DAS rural cuando Guadalupe Salcedo entregó las armas.

Caerle a Santos porque considera una opción dejar de policías rurales a los que durante 50 años han estado ejerciendo como tales en muchas regiones de Colombia, es creer que la guerra que están tratando de terminar conversando en La Habana se hizo de mentiritas, como en los juegos de Nintendo.

Han sido los guerrilleros los que han decretado e impuesto su orden (obviamente a su manera y dentro de su grado de incultura e ignorancia) en muchas partes del país. ¿Por qué entonces asustarse porque los van a oficializar?

Armar un batallón de policías con solo exguerrilleros puede ser peligroso para los unos y para los otros. Mezclarlos en distintas guarniciones puede ser más factible y menos riesgoso. Pero siempre será mucho mejor reintegrarlos a la vida ciudadana como policías rurales o guardabosques que dejarlos con la inminente opción de que se vuelvan unas bacrim y ahí si no hayamos hecho nada.

Hacer la paz después de que las dos partes no pudieron ganar la guerra exige sacrificar ilusiones pero no obliga a creer que toda solución es una estupidez.

Por GUSTAVO ÁLVAREZ  GARDEAZABAL
Tomado de ADN
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