La Fiscal General de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, desarmó legalmente al presidente venezolano Nicolás Maduro, quien anunció que emprendería acciones contra la Asamblea Nacional (o el Congreso) de su país si esta se atrevía a hacerle un juicio político.
La alta funcionaria judicial de la vecina nación aclaró que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) no puede disolver a la Asamblea Nacional, porque no es su competencia.
“La Constitución también establece las causales de la disolución de la Asamblea Nacional. La única causa remite al artículo 240. Cuando el Parlamento solicita moción de censura en tres ocasiones al vicepresidente de la República”, detalló la Fiscal Ortega durante una entrevista en la cadena de televisión Venevisión.
Queda claro que la Asamblea Nacional solo puede ser disuelta cuando esta exige la responsabilidad política tres veces en el mismo periodo del Vicepresidente de Venezuela, con la intención de destituirlo de su cargo y sin justificación alguna; entonces el Poder Ejecutivo puede dictar la disolución del Parlamento.
Extrañamente, en la máxima Ley no se habla de ningún otra causal, lo que denota una gran vacío en el Constitución política venezolana, pero así quedó estipulado en la carta magna y eso debe cumplirse.
