Un hombre causó la mayor polémica dentro del Proceso de Paz que adelanta el Gobierno Nacional y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en La Habana, Cuba. Se trata del subversivo conocido con el alias de «Mordisco», el misterioso jefe del Frente Primero «Armando Ríos», de esa organización rebelde, que opera en los departamentos de Guaviare y Vaupés.
El grupo ilegal anunció en un comunicado que no se desmovilizará en los acuerdos de paz, causando sorpresa entre los negociadores de La Habana y la opinión publica colombiana. Lo más grave del asunto es que el Frente «Armando Ríos», está llamando a otros Frentes para que se le unan y no apoyen el proceso de Cuba, porque se consideran traicionados. Los hombres de Néstor Gregorio Vera Fernández, alias «Iván Mordisco», quien lleva 18 años en las FARC, sostienen que no han sido derrotamos militarmente, no están de acuerdo con el modelo económico que se está negociado y no quieren meterse en zonas de concentración.
Este es un duro golpe para el Gobierno, pues el Ejecutivo creía que al mantener negociaciones durante más de cuatro años con los principales cabecillas de las FARC en La Habana, todos los integrantes de esa organización iban a obedecer lo que sus comandantes firmaran y así se acababa el grupo rebelde. Pero no contaban que habían disidentes como el «Armando Ríos» y otros que podían salir a la palestra pública en cualquier momento. Esto de debe, según expertos, a que las negociaciones tienen pocos beneficios para las bases o militantes rasos, que son los verdaderas combatientes del la guerrilla.
El Frente Primero funciona en las tupidas selvas del suroriente del país, que usa como escondite o trincheras. Es una de las estructuras más antiguas de las FARC y la más comprometida con el narcotráfico, pues controla los cultivos, los laboratorios y las rutas de la coca hacia Venezuela.
Su área de influencia va desde los alrededores de Miraflores (Guaviare), hasta las riberas del río Unilla, afluente del río Vaupés. Debido a la importancia de esta facción dentro de la organización guerrillera, también tiene injerencia en los sectores de Calamar y el río Inirída y en estos últimos años en los límites del departamento del Guaviare con el Guainía, donde posee mayor presencia.
Según la Inteligencia Militar, este grupo tiene unos 400 guerrilleros: 100 en zona de campamentos y 300 milicianos. El «Armando Ríos», desde comienzos de los años 80, se metió en el negocio de la coca a través del «gramaje», impuesto que cobran a los narcos que se instalen en su zona.
El Frente Primero –tras la muerte en el 2007 del tristemente famoso Tomás Medina Caracas, alias «Negro Acacio», jefe del Frente 16– se consolidó como uno de los financiadores del Secretariado General de la organización ilegal a través de la plata de la coca.
El «Armando Ríos», en diciembre de 2015 fue señalado por las autoridades de una de las violaciones al cese del fuego unilateral que se pactó en Cuba, porque reclutaron a varios niños indígenas. Recordemos que en su zona de influencia viven los nativos Nukak Makú.
Este Frente tuvo entrenamiento militar por parte de Milton de Jesús Toncel Redondo, ‘Joaquín Gómez’, uno de los principales negociadores de esa guerrilla en La Habana. No obstante, esta estructura armada saltó a la luz pública el 2 de julio del 2008, durante la llamada «Operación Jacque», en la cual que fue liberada por el Ejército colombiano, la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y otros 14 secuestrados, quienes duraron muchos años raptadas por el «Armando Ríos» de las FARC.
La Vigésima Segunda Brigada de Selva del Ejército informó que debido a su persecución, el Frente Primero ha perdido en el pasado a hombres importantes como Gerardo Antonio Aguilar, alias ‘César’, y Alexánder Farfán, alias ‘Gafas’, carceleros de las FARC, capturados durante la publicitada «Operación Jaque» en el año 2008. Además que muchos miembros importantes de sus filas se han desmovilizado, ver AQUÍ. Luego de la captura ‘César’, alias «Iván Mordisco» llegó al poder en ese grupo criminal.
El comunicado
Estos son apartes de la carta que envían los combatientes, liderados por alias «Mordisco», a la opinión pública:
“El Frente Primero de las Farc ‘Armando Ríos’ no se desmovilizará, por considerar que la política del Estado colombiano y sus aliados sólo buscan el desarme y la desmovilización de las guerrillas (…) Pretenden continuar gobernando con el mismo modelo económico”, justifican los hombres del Frente Primero.
“Hemos decidido no desmovilizarnos, continuaremos la lucha por la toma del poder por el pueblo y para el pueblo; independientemente de la decisión que tomen el resto de integrantes de la organización guerrillera. Respetamos la decisión de quienes desistan de la lucha armada, dejen las armas y se reincorporen a la vida civil, no los consideramos nuestros enemigos”, explican los subversivos.
En la misiva, los guerrilleros critican las zonas de ubicación acordadas en La Habana: “Las zonas de concentración son para guerrillas derrotadas, el Frente Primero ‘Armando Ríos’ de las FARC jamás ha considerado una derrota militar. Cualquier colombiano el común entenderá que la zona de concentración que nos están ofreciendo son cárceles asilo abierto y de seguro nadie querría entrar en estas trampas”.
El Frente Primero en su texto invita a los demás guerrilleros a unirse en contra del proceso de paz: “Morir sí, traición no. Luchamos para vencer no para ser vencidos”, advierten.
Santos le advierte al Frente Primero
Por su parte, el Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, desde el municipio de El Retorno en el Guaviare, le advirtió a los frentes disidentes de las FARC que se unan al proceso de paz o de lo contrario podrían ser combatidos con dureza.
“Alguien me decía en estos días que el Frente Primero de las FARC tenía dudas de si debía acogerse a este proceso de paz o no; que de pronto algunos iban a continuar y no se iban a acoger al proceso de paz. Permítame aprovechar aquí desde El Retorno, Guaviare, mandarle un mensaje a esas personas que tienen dudas: No lo duden, acójanse a este proceso porque será su última oportunidad”, indicó el Primer Mandatario en su ultimátum.
El Presidente también se refirió a la Fuerza Pública: “»He venido fortaleciendo nuestras Fuerzas Armadas, y hoy a mucho honor tenemos el mejor Ejército de nuestra historia (…) Una fuerza pública que no fue objeto de negociación con las FARC porque fue una condición que puse desde el principio”.
El Jefe de Estado informó que miles de soldados serán llevados al Guaviare para “perseguir a los que se queden por fuera”. De acuerdo con Santos, “cualquiera que tenga alguna duda que mejor la deje a un lado y se acojan porque es la última oportunidad que tienen para cambiar de vida porque de otra forma, se los aseguro, terminarán en una tumba o en una cárcel”.
No hay que descartar que «Mordisco», el jefe guerrillero que puso en jaque el proceso de paz, pueda llegar a la mesa de diálogos de La Habana para darle todos los beneficios que van a recibir los demás líderes subversivos que están allá, y controlar así esta insubordinación, tal como se hizo con el temible Hernán Darío Velásquez, alias «El Paisa», jefe de la Columna Móvil Teófilo Forero.
