Los precios del grano han caído un 27% desde febrero del 2015 Duberney Galvis La Otra Cara

¿Paisaje cafetero sin cafeteros?

Compártelo:
Los precios del grano han caído un 27% desde febrero del 2015.

De nuevo los cafeteros afrontan un problema coyuntural. Los precios han caído un 27% desde febrero del 2015. El PIC sigue desactivado contra todo pronóstico y, de los recursos que no se usaron en el 2014 por este concepto, nadie da cuentas. El gobierno desatendió la petición de Dignidad Cafetera y Federecafé de guardar este dinero para un fondo de estabilización del precio y ahora con el problema encima, se niega a reactivar el mecanismo de Protección al Ingreso Cafetero.

La negativa no es fortuita, pues en su escritorio hay un informe de la “Misión Cafetera” de Juan José Echavarría y compañía, que va en contravía de los intereses de los cafeteros. Ver Misión Echavarría-Lora: tan grave como la roya o la brocahttp://bit.ly/1c1wPXd. Nótese que la salida de Genaro Muñoz de la Federación de Cafeteros, cuya impopularidad creció porque dedicó la mayor parte del tiempo a aplaudir al gobierno Santos antes que defender a los cafeteros, tiene parte de esto, estorbaba su oposición al informe. Ahora la tal transición la aprovecharán para quitarle los últimos dientes a la Federación que aún con falencias, brinda garantías de compra al productor que es el eslabón más importante de la cadena. La misión ocupó dos años y recibió alrededor de mil millones de pesos, para confesar el propósito de empujar la producción cafetera al nivel del más puro libre comercio, estampado ahora con el “No más papá estado para los cafeteros”: http://bit.ly/1RVNufL. Y así, huérfana la caficultura nacional, habrá festín para los tiburones del mercado especulativo y sus oligopolios, esos que con cinismo dice el Dr. Juan José Echavarría ‘no le gustan’.

El rumbo va para paisaje cultural cafetero sin cafeteros. Advierten el desastre opiniones sensatas de empresarios cafeteros como Pedro Echavarría y Mario Gómez Estrada, integrantes de Comités Departamentales de Federecafé, y probados dirigentes del sector como Jorge Robledo y Aurelio Suarez, incluso citando informes de la Organización Internacional del Café OIC. La tacada inicial irá contra los productores empresariales que aportan el 65% del café que produce Colombia. Saben que en una caficultura con profundos problemas estructurales, sin empresarios cafeteros, no hay pequeños o medianos que aguanten la orfandad estatal.

Luego para desdicha de quienes encabezan tan desleal propósito con la caficultura colombiana, los cafeteros no han parado de organizarse. Agrupados en Dignidad Cafetera están dispuestos a luchar y defender por las vías civiles un sector que aporta cerca del 20% del PIB agrícola. Piden el PIC, que desde 1989 es lo más parecido a precio de sustentación, permite vender el café cubriendo los costos de producción que en la práctica oscilan entre $65 y $70 mil la arroba -ni Echavarría con sus maromas los pudo bajar de $54 mil- y son costos crecientes, que incluyen factores como la mano de obra, hoy al alza porque ante la ruina del agro los trabajadores rechazan heredar la pobreza que allí abunda y terminan desplazándose del campo.

Lo cierto es que los productores no van a arrodillarse. Ya ni la carnada de los cafés especiales, los que con cacareo prometió conquistar Gabriel Silva Luján cuando fue gerente de la Federación, la muerden con el apetito que quisieran quienes hacia este marginal y colmado mercado, de manera ingenua o no, intentan atraerlos para disimular la crisis. Van a movilización el 22 de junio en Armenia. Para exigir no solo el PIC, sino que el jefe de la nación cumpla su palabra firmada en los acuerdos: en el tema de la rebaja de los fertilizantes y la compra de las deudas que no ha querido reglamentar no obstante que el Congreso de la República aprobara la ley 1731 de julio del 2014.

Acto seguido la posta quedará en manos del gobierno nacional. Sabrán si le hacen un esguince al propósito de mercantilizar más el negocio cafetero, y atienden las razonables peticiones del sector  en beneficio de la economía rural; o si acuden de nuevo a esa especie de manual para torpes en el que niegan con vehemencia las peticiones y terminan incitando a los pueblos a conseguir lo solicitado mediante la movilización civil.

 

Duberney Galvis

Por: Duberney Galvis (Twitter: @DuberneyGalvis)

Compártelo:
La Otra Cara
La Otra Cara

La Otra Cara es un portal de periodismo independiente cuyo objetivo es investigar, denunciar e informar de manera equitativa, analítica, con pruebas y en primicia, toda clase de temas ocultos de interés nacional. Dirigida por Sixto Alfredo Pinto.


Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *