Bud Spencer, el rey de los golpes del cine

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Tal vez muchos jóvenes quizás no han oído hablar de él, pero fue un singular  héroe cómico que marcó el cine mundial en los años 70 y 80. El actor italiano Bud Spencer, cuyo verdadero nombre era Carlo Pedersoli, falleció en Roma a los 86 años.

La Otra Cara le rinde tributo a un hombre que parodiando las famosas películas llamadas Spaghetti (porque eran sobre el lejano oeste norteamericano, hechas por productores, directores y actores italianos) se volvió leyenda como un pistolero rudo, alto, gordo y fuerte en el western, que acabó con sus enemigos a punta de golpes con las manos abiertas, a manera de cachetadas. Con ese estilo entretuvo a millones de personas y marcó a una generación junto con su eterno compañero Terence Hill, también italiano, cuyo nombre es Mario Girotti.

Ambos adoptaron nombres artísticos estadounidenses por motivos comerciales y para encajar más en las películas de vaqueros gringos.

En el caso de Pedersoli, su seudónimo, Bud Spencer, fue en homenaje a su cerveza preferida, la Budweiser y su actor favorito, Spencer Tracy.  No solo era actor, fue guionista y productor cinematográfico. Obtuvo un  doctorado en Derecho, aunque nunca ejerció. También se licenció en Sociología. Además probó suerte con la literatura y escribió un libro de sus memorias en 2011 titulado ‘Mi vida, mis películas’.

El siempre dijo que nunca fue un actor, pero se vanagloriaba de hablar varios idiomas. Entre los seis que dominaba se encuentra el español. También fue cantante y compositor. Son de su autoría las canciones de algunas de las películas donde participó como actor y compuso varios temas para algunos de los cantantes más populares de los años sesenta.

Bud Spencer había sido obrero y bibliotecario en Brasil, Argentina y Uruguay, a donde su familia emigró al final de la Segunda Guerra Mundial. A su regreso a Italia llegó a ser un gran deportista profesional. Fue campeón mundial de natación en 1948 y participó representando a Italia en los Juegos Olímpicos de Helsinki de 1952, en los de Melbourne de 1956 y en los de Roma de 1960. Con veinte años se convirtió en el primer nadador italiano en rebajar el muro del minuto en los 100 metros libres.

Además del cine, Spencer se dedicó a otros negocios con los que probó fortuna. Era dueño de una compañía aérea llamada Mistral Air, especializada en turismo religioso. Su interés por la aviación comenzó mientras rodaba ¡Más fuerte, muchachos! (1972), en la que ejercía de piloto. Tras filmar la cinta obtuvo los títulos de piloto de avioneta y de helicóptero. También tuvo una empresa de confección de ropa infantil.

Bud Spencer  tuvo una gran relación con Colombia, porque en nuestro país vivió quizás una de sus mejores experiencias, ya que aquí inició su pasión por volar para la película «Más fuerte, muchachos». En 1957 trabajó en la construcción de la carretera Panamericana en el tramo entre Venezuela y Colombia. También, nuestra nación fue locación de tres de sus películas, dos con su eterna pareja cinematográfica Terence Hill,  («Más fuerte, muchachos», y «Dos misioneros») y otra que hizo en solitario titulada Banana Joe, en 1982.

Su gran amigo Terence Hill

Al igual que el mundo artístico, Terence Hill, también lloró la pérdida de su “mejor amigo”. Juntos protagonizaron un total de 19 películas.

En las cintas de western, el legendario Spencer combatía a golpes a los malos y Hill era el más rápido del oeste con las pistolas. Luego en las películas de acción y aventuras, Terence era el pillo simpático y atractivo y a Bud le tocaba el papel de fortachón cascarrabias.

Son célebres y quedaron en la historia films como «Tu Perdonas…yo no (1967)», «Le llamaban Trinidad (1971)»,  «Y si no, nos enfadamos (1974)», «Dos misioneros (1974)», «Dos súper policías (1977)» , «Quien encuentra un amigo, encuentra un tesoro» y «Juntos son Dinamita», entre tantas.

http://youtu.be/bB6wsxLwVQA

Como dijimos, Terence Hill y Bud Spencer compartieron créditos actorales en varias películas, pero su primera fue «Tú perdonas… yo no» donde personificaron a los vaqueros Cat Stevens y Hutch Bessy, respectivamente, que se veían envueltos en cómicas situaciones.

Según relató el propio Bud Spencer en una entrevista al diario El País de España en julio pasado de 2015, ellos se conocieron al rodar ese filme.

«Yo iba a rodar una película con Peter Martell, pero el día anterior sufrió una lesión que le impidió hacerla. Entonces, los responsables de la cinta buscaron rápidamente otra persona. Eligieron a Terence, que ya había trabajado en El Gatopardo y, por entonces, estaba rodando con Rita Pavone. A partir de ahí comienza una relación que aún hoy sigue viva. Nunca hubo un choque de egos, porque él era un actor preparado y yo no. Siempre fui un principiante», relató el mítico Spencer.

El napolitano Bud Spencer siempre fue un personaje bueno en sus cintas, cuyas actuaciones y gestos estaban llenos humor que deleitaban a los espectadores. Lo suyo fue una carrera hecha a puro golpes sonoros en sus películas que no tenían sangre ni sexo.

Los cinco puñetazos de Bud

En este entretenido video se relata la vida del bonachón Spencer y se describen sus característicos golpes en la pantalla.

«Con profundo pesar tenemos que decirles que Bud está volando hacia su próxima aventura», dice en la página oficial de Facebook de Bud Spencer… Hasta siempre fortachón.

Si quiere leer una entrevista completa con Spencer entre a jotdown.es

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La Otra Cara es un portal de periodismo independiente cuyo objetivo es investigar, denunciar e informar de manera equitativa, analítica, con pruebas y en primicia, toda clase de temas ocultos de interés nacional. Dirigida por Sixto Alfredo Pinto.


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