Así lo cree la ciudad, o al menos como lo creía después de meter en las urnas un voto contra Bogotá, más que a favor de ella,
En el año 1998 al 2000 fue también alcalde de la ciudad con más de 619 mil votos el 48 % de votantes como tenemos una memoria tan olvidadiza no recordamos lo que hizo en este periodo, bueno aunque no es mucho lo que hizo, casi nada, solamente los 29.640 y 41.000la ciudad que costaron entre 29.640 y 46.542 pesos que en su mayoría fueron de este último costo y aunque en su gobierno se implementó el Transmilenio en la ciudad, algo importante y necesario pero la contratación para realizar las losas de la calzada de Transmilenio fue un completo desastre en poco tiempo se empezaron a partir y nuevamente a la alcaldía invirtió dinero en una nueva contratación saldo que fue sacado del bolsillo de los bogotanos.
Pero oh sorpresa cuando en el 2016 fue elegido nuevamente, sin duda el Alzheimer vuela en el aire de la atmosfera bogotana. Un refrescante año de gobierno para los habitantes de la ciudad que con la venta de diferentes empresas públicas, apoyos a la “ honorable” y no cruel cultura del toreo omitiendo temas de reservas reserva Thomas Van Der Hammen y el amor de nuestro alcalde por los comerciantes informales.
Y aunque a trancas y a mochas como dirían algunos, se lograron radicar las suficientes firmas para iniciar un proceso de revocatoria, que aún no es posible por el poder de apellido y de estatus que tiene el no-doctor alcalde Enrique Peñalosa que aunque no es un pecado no tener doctorado si lo es engañar a la ciudad y aun así seguir riéndose de ella siendo la primera autoridad para ella.
Será q en algún momento aprenderemos los Bogotanos a decir no a las familias y personajes de siempre y a montar en el puesto a una persona con conocimientos y experiencia suficiente, que no gane por una buena charla y amistades sino más bien por una nueva manera de pensar y manera de manejar a Bogotá que pese a todo evoluciona constantemente y crece más y más.
Por: Nicolas Nieto
