El país comprobó que el presidente Santos no solo se equivoca, como todo ser humano, sino que engaña a los colombianos. La certificación de que la famosa Comisión Investigadora que dizque había nombrado para estudiar a la Policía chuzadora y extorsionista ,no había sido creada de verdad a 16 de febrero, día de la escandalera que obligó a la salida de Palomino,el viceministro Fierro y de Vicky Dávila,es muestra contundente. Pero lo permitido a las Farc en Guajira,corroboró mas el espíritu de engaño presidencial. Dejar pasearse a los jefes guerrilleros con su guardia armada por las calles de Conejo sin anunciarlo a gobernadora y al alcalde y sin habernos avisado a los colombianos que lo había permitido, es un engaño.
La Noticia de que Ecopetrol ha solicitado a la Agencia Nacional de Minería que le permitan cerrar los pozos La Reforma en Apiay, Caño Sur en Puerto Gaitán y CP009 en Acacías, demuestra que la empresa petrolera está comenzando a reconocer su equivocación de seguir explotando hidrocarburos a un precio mucho mas alto que el que le pagan por venderlo. Ojalá que de la misma manera actuaran para evitar que la controvertida Reficar resulte ser además de un despilfarro, una vena rota. Allá, refinan petróleo que extraído por Ecopetrol y puesto en Cartagena sale a casi 40 dólares el barril. Si lo importan del Golfo cuesta 25 dólares. Negocio elemental.
El torpe escalamiento negativo que ha tenido en las últimas horas el proceso de paz, que por tres años se ha ido llevando en La Habana entre el gobierno de Santos y la guerrilla de las Farc, puede echar al traste la esperanzas de muchos colombianos y generar la satisfacción de quienes se han opuesto a una paz negociada en las condiciones en que la ha planteado el gobierno. Tres hechos lo ponen en peligro. UNO, la férrea oposición de las Farc al tal plesbicito. DOS, la comedia de Conejo, que le ha mostrado al país por adelantado lo que va a suceder en los territorios que entreguen para concentrar guerrilleros y TRES, la necia actitud de gobierno y congresistas de no estudiar la posibilidad de una Asamblea Constituyente. Quien iba a creer que en la puerta del horno se quema el pan.
