En el sector de la telefonía móvil, 2015 comenzó con una nueva discusión entre los operadores, por un tema que parecía haberse solucionado: los cargos asimétricos. Tigo y Movistar enviaron a Claro dos facturas correspondientes al valor que debe pagar el operador mexicano.
Con sorpresa a la vuelta de unos días recibieron una carta firmada por Santiago Pardo, Vicepresidente de Asuntos Regulatorios devolviendo las facturas. (Ver factura devuelta 1). Tigo y Movistar solicitaron a la Superintendencia de Industria y Comercio medida cautelar para garantizar el pago, y Claro por su lado interpuso derechos de petición a la Comisión de Regulación de comunicaciones CRC para que le contestara cuánto y cómo debía pagar. La SIC y la CRC también intercambiaron comunicaciones oficiales para coordinar y evitar el choque de trenes. (Ver Carta)
La CRC en 2009, constató que el dominio permitiría a Claro eventualmente restringir la competencia, y en 2013 impuso las medidas asimétricas en interconexión para intentar resolver el problema. Estas medidas contra empresas dominantes han sido certificadas en varios países de Europa Occidental y América. La asimetría en interconexión móvil es la única herramienta que tiene hoy el regulador para contrarrestar el dominio de Claro. Expertos de diferentes áreas y el mismo Fedesarrollo han soportado esta tesis. En diciembre de 2014, la CRC conservó la asimetría por los próximos dos años.
Claro impidió que se tomaran medidas desde 2009 (en los anales del Congreso están las presentaciones de la CRC) y en el caso de las diferencias con ETB, que se originaron también por discusiones de cargos de acceso, el pago está en veremos. Claro solicitó en varias oportunidades a la CRC por intermedio de derechos de petición, aclaración sobre la aplicación de la resolución 4660 de 2014. El miércoles de esta semana que termina, la CRC contestó el alcance de la resolución. Claro, que asegura ser respetuosa de las decisiones de las autoridades, envió a mitad de semana un comunicado informando que una vez sea notificado formalmente de la decisión de la SIC procederá a cumplirla.
Claro ha reiterado en varias oportunidades al mercado que considera que los cargos asimétricos, son subsidios o transferencias de dinero entre competidores, que generan ineficiencia y distorsionan la competencia, como lo indicó el reciente informe de OCDE para el sector de Telecomunicaciones en Colombia. En la presente discusión, los beneficiarios de los cargos asimétricos (Movistar y Tigo) son además empresas multinacionales con participación del Estado.
Según la OCDE, club de las mejores prácticas en política pública al cual quiere ingresar Colombia, no se justifica que jugadores grandes y establecidos sigan recibiendo subsidios de sus competidores. Claro dice, por ejemplo, que Movistar maneja discursos diferentes de los cargos asimétricos en diferentes países. Movistar dice, por ejemplo, que Claro usa prácticas dilatorias jurídicas en México y Colombia para “empapelar” los problemas y cuentas por pagar. El presidente de TIGO, Esteban Iriarte dice sólo creerá cuando vea el pago, y la compañía también emitió su propio comunicado hace dos días. (Ver Tigo)
Para insertar nuestra economía en el mundo digital, se requiere contar con una industria TICs, competitiva, sostenible y fuerte, y eso solo se logrará si en los mercados de comunicaciones existen las condiciones que garanticen la competencia entre las empresas y se maximice los beneficios al consumidor. En caso de no darse esta competencia, el Estado debe corregir el curso del mercado a través de las diferentes herramientas regulatorias, jurídicas y técnicas previstas en la normatividad vigente.
En mi opinión la pelea la deben dar las compañías en el mercado, con ofertas y buen servicio y no en los tribunales o despachos judiciales. Estos temas los resuelve la CRC o en su defecto el Ministro Diego Molano invitando a una reunión informal a los tres presidentes de las compañías a aterrizar la mecánica de las conciliaciones de interconexión.
Las cosas en la vida se arreglan primero en charlas amistosas donde cada parte exponga sus inquietudes, y luego viene el proceso de formalizar los acuerdos al papel. Los comités de interconexión existen, pero si dejan eso en manos de funcionarios de mediano nivel, necesariamente saltan nuevamente las demandas, peleas y acusaciones. Para ganarse a los usuarios las empresas deben dejar de dar tanto protagonismo a sus abogados. Invito a que brillen los genios de mercadeo y servicio al cliente.
