La Alcaldía de la Capital de Antioquia continúa con todas las medidas de autocuidado en sus 18 centros de protección y en los dos dormitorios sociales. En estos lugares, no hay casos activos de coronavirus. 374 mayores de 80 años han recibido la vacuna y avanza el proceso con las personas de la siguiente fase.
Con acciones de atención integral, que incluyen la salud física y mental, el acompañamiento psicosocial y la sensibilización frente al autocuidado, la Alcaldía de Medellín ha preservado la vida de los beneficiarios de los 18 centros de protección y los dos dormitorios sociales que tiene para personas mayores.
De 1.594 beneficiarios atendidos en estos lugares, con edades entre los 55 y los 103 años, 567 han dado positivo por coronavirus desde el comienzo de la pandemia. Todos recibieron atención inmediata y se destinaron zonas específicas para su estadía durante la enfermedad. En este momento el 97 % se encuentra bien y no hay casos activos en ninguno de los sitios, en articulación con la Secretaría de Salud se han vacunado 374 mayores de 80 años y avanza la inmunización de la siguiente fase.
De julio pasado a la fecha, un 3 % de los usuarios atendidos falleció por covid-19. Esto equivale a 53 ciudadanos (18 mujeres y 35 hombres), quienes presentaban otras patologías.
“Nadie estaba preparado para la contingencia que empezamos a vivir el año pasado. Desde que nos enfrentamos a ella tuvimos claro que proteger la vida era lo más importante, especialmente de las poblaciones más vulnerables, como lo son las personas mayores. Por eso, dispusimos todos los esfuerzos para que en nuestros hogares de protección tuvieran alimentación, salud, atención psicosocial e interacción virtual con sus redes de apoyo, entre otras actividades”, señaló la secretaria de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos, Mónica Alejandra Gómez.
Estas son las declaraciones de la Secretaria Gómez:
Algunas de las estrategias que continúan son: toma de temperatura, lavado frecuente de manos, uso correcto del tapabocas y desinfección de superficies y espacios. Todo esto bajo la supervisión de los profesionales psicosociales y de la salud.
Adicionalmente, se han realizado videoconferencias con familiares y amigos para mitigar los efectos del aislamiento, salidas por turnos a las zonas comunes (Pico y Hábitat) y actividades virtuales como estrategias lúdico recreativas, artísticas, culturales y de actividad física para promover el buen uso del tiempo libre y la salud mental.
En el caso del Dormitorio Social, que es un modelo de atención nocturna donde se albergaron 350 beneficiarios en este periodo, se adecuó el espacio para que las personas mayores estuvieran confinadas y no salieran a la calle durante el día, por lo cual allí se suplieron todas sus necesidades básicas.
“La primera etapa de la pandemia en el Dormitorio Social estuvimos no solamente resguardados del coronavirus, sino también muy divertidos y amenos, recibiendo talleres, recreación cognitiva y física, practicando escritura creativa, además nos dieron alimentación completa”, señaló Rafaela Niño, beneficiaria del Dormitorio Social, sede Continental.
Esta es la versión de la señora Niño…
Asimismo, se restringió la presencia del personal administrativo en los hogares. En el caso de la Colonia de Belencito, donde habitan 250 personas en modalidad diurna y nocturna, los 15 profesionales de asistencia se alojaron en un pabellón con la intención de evitar al máximo sus salidas durante el primer pico de contagio que vivió la capital antioqueña, para mitigar los riesgos de propagación del virus.
