El balance de los 15 días de rifirrafe con Venezuela solo deja una conclusión contundente: Maduro va siempre adelante.No solo explotó la debilidad de Santos por defender la mesa de La Habana sino que entendió y puso a su servicio la incapacidad de la política exterior de Colombia. En menos de 15 días, ganó en la OEA porque sabía que Colombia no presentaría a los carteles de Los Soles y Guajira, integrado por oficiales militares venezolanos,como los generadores la crisis. Acudió a la ONU para plantear a la inversa ante el Secretario General el problema migratorio, y desde Vietnam acusó a Bogotá de implementar la crisis económica venezolana por fijar el precio del Bolívar y permitir la sangría de mercaderías por Cúcuta. Para completar pide un diálogo con Santos, donde el presidente colombiano iría de invitado, no de igual a igual.
Las protuberantes falencias de la política exterior colombiana, basada en la falta de coordinación interna del gobierno y en la mala memoria de los actos provocadores cometidos en el inmediato pasado, está llevando a que los vecinos, Ecuador y Panamá, les estén volteando la cara al país, y lo que es más grave, se acerquen peligrosamente a situaciones de hecho.Varela no le perdona a Santos su manera grotesca de desconocerlo y amedrentarlo frente a las exportaciones desde Colón. Y ahora Correa, ante el trauma que significa en su economía la dolarización de la moneda amenaza repetir el show de Cúcuta en Rumichaca y así cobrar la invasión de territorio ecuatoriano cuando el ataque al campamento de Raúl Reyes.Lo que no se sabe es hasta dónde llegarán los dos gobiernos frente a las inversiones colombianas en sus respectivos países y si tomarán medidas contra ellas de manera subterránea.
La batalla del régimen santista contra los azucareros parece no tener fin. Como la producción de azúcar en Colombia supera con creces el consumo interno. Pero sobre todo ,porque como desde la apertura económica de Gaviria se implementó legalmente un fondo de precios y se le puso protección arancelaria, para muchos economistas de los Andes eso es un exagerado privilegio. Por razones políticas y vengativas, el gobierno Santos inicialmente trató de clasificarlos absurdamente como si fueran un cartel de precios y ahora levantando la protección arancelaria, ha tratado de arrebatarles esas ventajas comerciales sin pensar que de hacerlo generarían un problema social y con ello no corregiría la pereza que caracteriza a los cultivadores de caña ni la falta de eficiencia de la que hacen gala los ingenios azucareros.
Informes de inteligencia desarrollados hace unos años cuando el presidente Santos actuaba como Ministro de Defensa de Uribe y luego, cuando atacaba con furia a Chávez desde su columna de El Tiempo, indican que los objetivos militares de los misiles que los venezolanos pueden lanzar contra Colombia son las ciudades de Barranquilla, Cartagena y Bucaramanga. A Santa Marta no lo tocarían por razones históricas bolivarianas y a Cúcuta menos, por las cercanías a la frontera y nexos muy fuertes con las gentes del Táchira que se podrían rebotar contra el régimen de Caracas. Colombia, que se sepa, no tiene establecido un plan de defensa de esas ciudades ni fuerza suficiente para repeler tan dañinos misiles.
Aunque los defensores a ultranza de las Fuerzas Militares Colombianas consideran que la experiencia del Ejército y la Policía es superior a la de las fuerzas armadas venezolanas, sería un absurdo ir a la guerra frente a un país como Venezuela. Maduro está armado hasta los dientes y con los mejores y mas modernos aviones, los tanques, submarinos y buques cargados de misiles y además cuenta con las fuerzas civiles de choque, creadas y entrenadas por Chávez para ese enfrentamiento con Colombia que siempre fue su imaginario y se lo contagió a todos los chavistas de boina roja.
La Corte Constitucional ha citado para el próximo miércoles 9 de septiembre al presidente de la república, Juan Manuel Santos, al expresidente Alvaro Uribe Vélez, al procurador Ordoñez, al representante Barguil y a otro poco de integrantes del gobierno Santos para una audiencia pública sobre el Acto legislativo 02 de 2015, muy mal llamado de “ equilibrio de poderes”. Como se conoce, ese Acto Legislativo fue demandado varias veces, entre otros por el Fiscal Montealegre y generó dentro de las Cortes una protesta que solo medio pudo apagar Leonidas Bustos, presidente de la Suprema, haciendo creer que hablaba a nombre de toda la Corporación.
Alrededor de los pagarés que el abogado Gustavo Prado ha divulgado por estos días sobre la financiación que dizque Dilliam Francisca Toro brindó con préstamos de una de sus empresas agropecuarias en las elecciones del 2007 a varios candidatos a las alcaldías del Valle, hay una historia humana y otra jurídica. La humana es que el abogado Prado fue por muchos años esposo de Clara Luz Roldán, la actual gerente de la campaña de Dilliam Francisca a la gobernación. Y la segunda que a Prado hace varios años le suspendieron su tarjeta de abogado en el consejo Superior de la Judicatura.
Se conoció el fin de semana en Cartagena que la determinación por la cual el presidente Santos tuvo que suspender en el ejercicio del cargo al popular Campo Elías Terán como alcalde de la ciudad amurallada,(cuando ya se encontraba agonizante), se vino abajo por inconsistente. Sus miles de partidarios que lo hicieron alcalde con 160 mil votos pasan la voz desde el sábado que ante tamaña injusticia hay que vengar a Campo eligiendo alcalde al periodista Manolo Duque, quien lo reemplazó en su oído programa de radio y ahora aspira como candidato independiente a ocupar la silla que le arrebataron al inolvidable hombre de radio.
La vida da vueltas en redondo. En 1998 José Noé Rios hizo parte de los negociadores de Maguncia con el ELN. Allá también estuvieron el actual presidente Santos y su ahora ministro de Defensa Luis Carlos Villegas. Lo aprobado en el convento alemán fracasó por la negativa de los jefes elenos de permitir la presencia a la hora de la firma del documento final del entonces presidente electo, Andrés Pastrana, quien se encontraba en París y había aceptado desplazarse hasta allá. Ahora el gobierno ha encargado a José Noé de revivir las conversaciones preparatorias con el ELN porque muy probablemente el exprocurador Bernal Cuéllar se aburrió de la dilatación permanente del proceso.
