Un nuevo problema y de grandes magnitudes se le esta presentando al postconflicto en Colombia; definitivamente el Ejército de Liberación Nacional (ELN) no tiene al interior de su organización un verdadero consenso de iniciar una dialogo con el gobierno en aras de inmovilizar sus tropas y reinsertarse a la vida civil. La realidad es que esta guerrilla no tiene un mando centralizado de sus frentes y el denominado COCE (comando central) es en la practica una representación de su organización con mas fines políticos que militares. Esto quedo mas que demostrado con el secuestro de los periodistas en el Catatumbo la semana pasada, donde los miembros del COCE y los delegados de este para los diálogos con el gobierno ni desmentían ni afirmaban que tenían los periodistas; tanto así que los conversaciones de la Iglesia fundamentales para acordar la liberación fueron realizadas directamente con los lideres del frente Nororiental responsables del secuestro.
Lo que demuestra una guerrilla federalizada con una autonomía muy fuerte de sus frentes convirtiendo en una utopía las negociaciones, pues seria incierto que los acuerdos sean cumplidos por todas sus tropas.
El problema es que sin la desmovilización del ELN el postconflicto en Colombia va tener serias dificultades para su desarrollo, por que el reciclaje de guerrilleros de las FARC en el ELN va ser una realidad que ya se empieza a observar, no podemos decir que es mas que anecdótico que desde el cese de fuego de las FARC el ELN ha venido demostrando un fortalecimiento en sus acciones armadas. Igualmente no extrañemos que inicien a tener presencia en territorios en donde no la tenían o eran santuarios de las FARC, el propio negocio del trafico de droga e impuesto de gramaje en zonas de las FARC podrían continuar a manos de estas pero con otra razón social ELN. Y una situación que aun no se cuenta con claridad en la Habana que es la dejación y entrega de las armas de las FARC cuando se materialice no podremos saber a ciencia cierta cuantas de estas puedan haber quedado previamente en manos del ELN.
Como vemos la culebra seguirá viva, pues solo se corto una parte importante de su cuerpo pero la cabeza sigue viva y nos puede dar sorpresas muy negativas.
Por Carlos Patricio Eastman Barona
