Debemos llegar a la paz, pero no tapándonos la boca

Compártelo:

En Tuluá, en épocas de los Pájaros que sembraban el terror pero eran protegidos por la autoridad civil y la uniformada, los muertos nunca eran descritos como asesinados a bala. No, morían «de infarto» así tuvieran los orificios en la cabeza y cayeran en un mar de sangre.

Lo que está sucediendo estos días para descrédito absoluto de la Argentina y de su presidenta, es igual. Al fiscal Nisman lo suicidan en su apartamento custodiado por 10 escoltas después de haber denunciado a la presidenta Cristina por encubrir a los terroristas iraníes que volaron la sede los judíos en Buenos Aires, con tal de recibir petróleo a menos precio y a pocas horas de presentarse ante el Congreso a ratificar su denuncia.

El tsunami que esa muerte del Fiscal Nisman ha precipitado no tiene límites en la Argentina y puede terminar arrastrando a su gobierno. Cunde el desconcierto vergonzante entre sus ciudadanos y asoma la torpeza en las actuaciones del grupo que gobierna.

En Colombia no ha sucedido eso todavía, pero el unanimismo que está buscando el gobierno Santos para que todos los columnistas y los medios coincidan en alabar su gestión y no hablar de lo maluco, hace pensar que podemos llegar a iguales extremos.

Yo que aparezco como víctima de la mordaza para complacer al gobernante, temo por el futuro de este país en donde todos terminen creyendo que la gestión presidencial es solamente admirable.

Debemos llegar a la paz pero no tapándonos la boca. Debemos impedir que a las Bacrim las sigan patrocinado porque son capaces de tirarse en la paz. Mandarnos callar es suicidar la democracia.

Por GUSTAVO ÁLVAREZ  GARDEAZABAL
Tomado de la República
Compártelo:
La Otra Cara
La Otra Cara

La Otra Cara es un portal de periodismo independiente cuyo objetivo es investigar, denunciar e informar de manera equitativa, analítica, con pruebas y en primicia, toda clase de temas ocultos de interés nacional. Dirigida por Sixto Alfredo Pinto.


Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *