El fiero combate entre Donald Trump y medios politizados

Compártelo:
Lo que más disgusta a los medios de comunicación es que Trump los confronta, no les hace el juego, no les camina, no les obedece, y es política e ideológicamente adverso.  No cabe duda que la prensa han informado malintencionadamente que Trump es moralmente despreciable y politicamente inepto.

El delirante ataque de la prensa contra el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no tiene fin en esa tribuna inquisidora en la que se han convertido todos los medios de comunicación que se autodenominan progresistas. Y es que no pasa un día sin que periodistas, usurpadores de jueces, usen la desleal costumbre de darle un manejo político a la noticia, mezclándola mezquinamente con opinión, para tratarlo de loco, irresponsable, racista, payaso e incapaz.

Para los medios tradicionales colombianos e internacionales, desde @bluradioCo hasta Univision y CNN, el presidente de los Estados Unidos es una especie de personificación del mal, victima de un juicio plagado de maniqueísmo fanático y una arrogante discriminación ideológica ejercida por periodistas que mancillan la deontología de su profesión.

Y es que según la gran prensa progresista, Trump inspira para todo lo cuestionable. Es como una rica mina contaminada de donde extraen sin licencia lo mas vil para burlarlo y exponerlo como botín de la información amañada.

Por atacarlo disfrazan deliberadamente la grosería con la irreverencia y el maltrato con la critica. En el mismo USA existen series de televisión donde lo insultan sin escrúpulos.

No olvidemos que acá mismo en Colombia la privilegiada e irreflexiva seudo-periodista Vanessa de la Torre, casada con un primo del Presidente Juan Manuel Santos, se atrevió a llamar prostituta a la esposa de Trump; porque no basta con agraviarlo a el, sino que se atreven a ultrajar a su entorno familiar.

El sistemático ataque mediático comenzó desde que el millonario magnate presentó su aspiración presidencial. Por alguna razón la gran mayoría de medios en USA se hicieron sus enemigos personales y políticos, le declararon la guerra y siempre lo dieron perdedor por «payaso, peligroso, radical e incapaz». Y que paso? pues que les ganó a todos, se convirtió en presidente, y eso despertó una inquina invencible en los periodistas mas influyentes. Pero lo que mas enfurece a esa prensa, es que Trump no le hace el juego, no le camina, no le obedece y le es política e ideológicamente adverso.

A Trump le escrutan el mas mínimo error para magnificarselo, le escudriñan su pasado, le buscan delitos, problemas con su pareja, con sus hijos, con sus subalternos, y todo el tiempo tiene encima una especie de polígrafo manejado por feroces periodistas prestos a devorarlo.

Patético caso sucedió hace poco cuando en una respuesta sobre la difícil situación en Venezuela, Trump dijo que Estados Unidos no podía ignorar la tragedia de un país vecino y que entre las soluciones estaba la opción militar.  Declaración por demás acertada y digna de una superpotencia que vigila el orden mundial.

Lo que vino enseguida en los medios progresistas fue previsible. Una avalancha de disertaciones irresponsables e hipócritas. Irresponsables porque maliciosamente interpretaron su declaración como una amenaza de invasión a Venezuela y un inminente desembarco del ejercito estadounidense en Caracas; e hipócritas porque en el fondo, todos desean morbosamente la opción militar porque esa vía es noticiosamente mas vendedora y radicalmente mas eficaz para sacar del poder a Nicolas Maduro, presidente de Venezuela.

Es claro que los medios han informado malintencionadamente que Trump es moralmente despreciable, maltratador, mala persona y políticamente inepto.

En esa permanente politizacion pierde la verdad pues no se ejerce un periodismo equilibrado e imparcial cuando se trata de informar, analizar y opinar sobre los hechos y actividades de algunos personajes mediáticos. Entonces se recuerda con vergüenza profesional la frase del pensador americano Mark Twain. «Si usted no lee el periódico está desinformado, y si lee el periódico está mal informado». Lo dijo también el veterano periodista Juan Gossain cuando reconoció que «Hay un manejo asqueroso de la prensa«.

Dentro de todo este escenario, lo mas paradójico es que mientras periodistas y medios denigran a toda hora de Donald Trump, la economía de USA crece y el desempleo cae a los niveles mas bajos de los últimos quince años. Eso no lo dicen, no lo analizan, no se lo reconocen.

Toda esta degradación del periodismo sano, la opinión, y la calidad de la información que destroza lo mas preciado que es la verdad, preocupa y asquea porque esa felonía se ejerce y sufre en Colombia. La victima es un expresidente al que los grandes medios mantienen en la mira, escrutan, provocan, tergiversan y maltratan por las mismas razones que atacan a Trump; porque no les hace el juego, los confronta, no les camina, no les obedece y porque le es política e ideológicamente adverso.

Por: Edgar de Castro                                                                                                       @Edetor

 

Compártelo:
La Otra Cara
La Otra Cara

Periodismo Investigativo


Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *