Luego de un operativo de desalojo realizado por efectivos de la Policía Nacional en predios del antiguo relleno sanitario del barrio Henequén de Cartagena, al sur de la ciudad, la Defensoría del Pueblo pidió investigar posibles abusos en el uso de la Fuerza Pública y solicitó buscar soluciones alternativas para la población vulnerable que quedó inerme después de la diligencia.
El organismo de control les advirtió en un comunicado a la Alcaldía de Cartagena y al Comando de la Policía Metropolitana, que existe un panorama desalentador por las condiciones en que quedaron los sitios de alojamiento de las personas que allí habitaban (unos 500 cambuches), algunos de los cuales fueron incinerados por completo, ello sin contar las quejas recibidas respecto al lanzamiento de gases lacrimógenos que habrían afectado a niños, ancianos e incluso personas que nada tenían que ver con el desalojo. Las imágenes hablan por sí solas.
«La Defensoría no desconoce el derecho a la propiedad privada, y por el contrario respeta y acata las decisiones judiciales que propenden por la defensa del mismo, pero considera que cuando existen situaciones especiales y personas vulnerables como las anteriormente mencionadas, incluido un ciudadano de la tercera edad en condición de discapacidad presuntamente afectado por los agentes policiales, es necesario aplicar principios de distinción y proporcionalidad para la salvaguarda de los derechos humanos», afirma el Ministerio Público.
La Defensoría, que visitó el sitio de la diligencia, encontró personas mayores y menores de edad que mostraron lesiones aparentemente ocasionadas en desarrollo del operativo, y recibió denuncias según las cuales los uniformados tomaron líquidos y bebidas gaseosas de la comunidad sin permiso alguno.
La entidad también le solicitó a la administración distrital de la capital de Bolívar explicar las razones para anticipar dicha diligencia, al tiempo que le pidió disponer planes de ayuda humanitaria de emergencia para los adultos mayores, los niños y las personas más desprotegidas en ese sector de la ciudad heroica.
Finalmente, la Defensoría recibió versiones de los agentes policiales, de acuerdo con las cuales jóvenes habitantes de una de las zonas aledañas los atacaron con armas de fuego y otros elementos a los uniformados, ante lo cual la Entidad instó a la Fiscalía General de la Nación para que revise esa situación y de paso haga seguimiento a las denuncias de los ciudadanos.