Se acordó, entre otras cosas, la creación del «Fondo de Cali» para compartir los beneficios económicos derivados de los recursos genéticos, así como el reconocimiento del rol de las comunidades afrodescendientes. En tan solo doce días, más de 900.000 personas visitaron la Zona Verde de la COP 16.
En tan solo doce días, los 350.000 m2 de la Zona Verde de la COP16, fue visitada por más de 900.000 personas de distintas regiones del mundo, superando más del doble de la expectativa inicial y generando más de tres mil empleos directos e indirectos para su operación.
“La zona verde fue un éxito total, se tenía previsto un ingreso de aproximadamente 150 mil personas, en este momento el registro está en más 900 mil personas, y se lograron ventas por más de trescientos millones de pesos, por parte de los Negocios Verdes y las economías de la biodiversidad”, explicó Mauricio Cabrera, viceministro de Políticas y Normalización de MinAmbiente.
La COP16, convierte a Cali en la capital mundial de la biodiversidad que logró movilizarse y activar su economía local y nacional, con propuestas que le apuestan a la conservación de los recursos naturales y a una movilización mundial, “Este encuentro marcó una concurrencia desde lo global y devolvió el orgullo que Cali había perdido históricamente y que se reactiva gracias a una actividad que puso en el centro de la biodiversidad del mundo la ciudad de Cali”, sostuvo José Perea, Jefe de la Oficina de Negocios Verdes de MinAmbiente.
Economías campesinas y negocios verdes en la Zona Verde de la COP16
Las ventas de las cerca de tres mil economías populares, campesinas, afros y Negocios Verdes de todo el país, lograron que emprendimientos como Cuaro Viche de Río, alcanzaran ventas significativas, “Para nosotros fue realmente muy especial ser parte de este momento histórico en Colombia, trajimos a la COP16, quince cajas de viche y tuvimos ganancias en alrededor 7 millones de pesos. Entonces de aquí, nos vamos completamente recargados y felices” finalizó Gilmaren Aragon, directora de Cuaro Viche de Río.
En la historia de las COP, es la primera vez que se establece una Zona Verde con la participación de la gente. Por ello, esta Cumbre de Biodiversidad marcó un cambio en la forma en que la humanidad se relaciona con el Convenio de Diversidad Biológica y se moviliza, logrando que todo el país se articule en sus territorios con un mismo objetivo: alcanzar la Paz con la Naturaleza.
Después de esos doce días de intensas negociaciones y una maratónica plenaria de cierre,concluyó la COP16 en Cali con importantes acuerdos. Uno de los logros más destacados fue la creación de un órgano subsidiario que permitirá a los pueblos indígenas y comunidades locales tener voz y voto en el Convenio sobre Diversidad Biológica, tras 26 años de trabajo en el Artículo 8J.
“Estamos muy contentos, satisfechos. Esta ha sido una COP histórica para el convenio de biodiversidad, Colombia como anfitrión logró los objetivos que se propuso”, señaló la presidenta de la COP16, la Ministra de Ambiente Susana Muhamad.
Camila Paz Romero, vocera de los pueblos indígenas, afirmó que este avance “es un referente mundial que reconoce la necesidad de una participación seria y efectiva de nuestras comunidades para cumplir los objetivos del convenio”.
Además, se oficializó el rol de las comunidades afrodescendientes en la protección de la biodiversidad, una iniciativa de Colombia y Brasil, liderada por la vicepresidenta, Francia Márquez. Este reconocimiento abrirá acceso a financiamiento para proyectos de conservación y permitirá su participación en futuras discusiones ambientales.
También se acordó la creación del «Fondo de Cali», un mecanismo para que los beneficios económicos derivados de los recursos genéticos sean compartidos con los países de origen. Empresas farmacéuticas y cosméticas que emplean secuencias de ADN en sus productos deberán contribuir económicamente, ayudando así a los países proveedores a proteger su biodiversidad.
A estos logros se suman la aprobación del programa de trabajo para pueblos indígenas y comunidades locales hasta el 2030 y el acuerdo para identificar y proteger las áreas marinas de importancia ecológica en aguas internacionales, respetando derechos y jurisdicciones de los Estados.
Asimismo, se destacó la declaración de la Coalición de Paz con la Naturaleza, una iniciativa con la que el Gobierno Nacional busca movilizar a ciudadanos y actores claves para enfrentar la crisis ecológica en el planeta.
“La paz con la naturaleza es una consigna social y eso para nosotros tiene un valor incalculable porque es desde allí que se hace el cambio”, indicó Muhamad.
Sin embargo, quedaron pendientes dos temas cruciales: La movilización de recursos entre 2025 y 2030 para implementar el Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal y la creación de un marco común de monitoreo y reporte para asegurar el cumplimiento de las metas de financiación.
La COP17, programada para 2026 en Armenia, representará una nueva oportunidad para avanzar en estos puntos pendientes y fortalecer la cooperación global en biodiversidad.