Luego de la extraña desaparición o robo de 80 vehículos en un parqueadero de Montería (Córdoba), los dueños de los citados carros emprenden acciones legales para que la Administración Judicial local les reponga sus bienes. Sin embargo, nadie les responde y hasta parece que hay órdenes en esa entidad de ocultar el tema.
Los vehículos, de alta y media gama, eran guardados en el parqueadero Sucre (en el barrio Sucre de Montería) porque estaban embargados o secuestrados por bancos dentro de procesos judiciales y la misión de Alfonso Jairo De la Espriella Burgos, Director Ejecutivo Seccional de Administración Judicial – Rama Judicial de Córdoba, era velar por su buen estado y que estuvieran seguros para cuando los dueños fueran a reclamarlos.
Luego de varios rumores o chismes entre la población se comprobó este inexplicable caso, digno de algún contador de chistes de taberna o velorio famosos en la zona. Al final el run run se volvió verdad: los carros se perdieron y hasta ahora no aparece ninguno. El valor de los vehículos podría superar los 3.000 millones pesos.
La inverosímil historia ya está en poder de la Fiscalía que investiga cómo por arte de magia desaparecieron los automotores, pero además se han reportado graves amenazas de muerte contra quienes se atrevieron a revelar el tema. La denuncia en el ente investigador la puso el mismo Director de la Rama Judicial de Córdoba, Alfonso De la Espriella, quien asignó legalmente ese parqueadero para cuidar los carros.
El administrador del Parqueadero dijo que el local lo habían vendido porque el negocio no estaba dando dinero y, sin autorización judicial y ningún tipo de aviso, se llevaron los carros a donde un nuevo administrador en otro parqueadero ubicado, ubicado en el km 11 vía Montería, muy cerca del aeropuerto Los Garzones de la capital ganadera. Un terreno baldío y sin infraestructura, cuyo dueño tampoco aparece, al igual que los vehículos.
La Rama Judicial asegura, como justificación, que cuando fueron ha hacer el conteo de los carros y a tomar fotografías, insólitamente, a pesar de ser autoridades judiciales, tuvieron que «salir corriendo» porque los vigilantes del nuevo parqueadero, como se dice coloquialmente, los braviaron y los amedrentaron hasta sacarlos, porque según ellos, no tenía autorización para entrar.
Los rumores de la pérdida de los autos volvieron a coger vuelo y un abogado que había logrado el desembrago de una camioneta Nissan, confiado, y con llaves en mano fue a recogerla con la propietaria del carro, pero no había nada. La sorpresa también fue para los miembros de la Rama Judicial, porque según dicen el lugar estaba más vació que de costumbre. Revisaron los inventarios y eran 28 vehículos de los que no había rastro.
Así fue registrado el hecho en el medio local Gs Noticias…
Después llegaron las amenazas anónimas. “Deje de hacer lo que está haciendo, usted ya sabe, cuide de usted y su familia”, le advirtieron a uno de los investigadores de la Rama.
En diciembere pasado (2022) varios propietarios que superaron los líos judiciales fueron al citado «parqueadero» a buscar sus vehículos y la respuesta fue insólita: Nadie podría entregarles sus bienes porque el local estaba cerrado “por vacaciones y volvían hasta enero”.
“En diciembre, luego de que el Juzgado Segundo emitiera el desembargo, nos dirigimos al parqueadero ubicado en el km 11 vía Montería. En el sitio, un vigilante informó que la administración estaba de vacaciones y volverían en enero. El día 16 de enero, se dirigieron nuevamente al parqueadero y el lote estaba desocupado, no había nadie en el lugar y los teléfonos apagados”, comentaron algunos afectados en un documento de denuncia que publicó la revista Semana.
Ante estas irregularidades, los hombres de la Rama Judicial llegaron al parqueadero, y encontraron un potrero en abandono, sin vigilantes. Lo único que se mantenía era un aviso azul que decía “administramos jurídico”.
De acuerdo con Semana, De la Espriella señaló al respecto que “no faltaron ni fallaron los controles, hay evidencia de las visitas de inspección que se realizaban, pero muy hábilmente trasladaron los vehículos sin autorización entre una visita y otra. Deben responder ante la justicia”.
Sin embargo, muchos de los damnificados que hablaron con nuestro portal especulan que la denuncia de De la Espriella fue para quitarse la responsabilidad y salirse del lío, pero «él es el único responsable del caso y posiblemente sabía lo que estaba sucediendo». En todo caso, el este servidor de la justicia regional «es el que debe responder por este descarado robo».
El caso del parqueadero se conoció en octubre de 2022 y luego de varios meses los vehículos no aparecen.
Los antecedentes de los De La Espriella siembran muchas dudas
Recordemos Alfonso Jairo De La Esperiella Burgos es hermano de Miguel Alfonso De La Espriella Burgos, ingratamente recordado entre los colombianos por sus grandes nexos de amistad y compañerismo con el sanguinario jefe de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) Salvatore Mancuso, oriundo de Montería. Miguel Alfonso fue condenado por paramilitarismo pero tiene una gran influencia en la región.
Alfonso Jairo también es hermano de Hernando De la Espriella Burgos, hombre de confianza el actual Gobernador de Córdoba, Orlando Benítez Mora, cuestionado y denunciado en la Fiscalía, la Procuraduría y la Contraloría por multiples contratos irregulares y obras inconclusas en su departamento. Hernando se desempeña como Jefe de la Oficina Jurídica de la Gobernación cordobesa, donde ha sido cuestionado por su mala gestión y su favoritismo con algunas personas.
Hernando De La Espriella fue famoso en meses pasados porque el Gobernador Benítez lo quería imponer como Gerente de Telecariba y no cumplía los requisitos y hay denuncias sobre su falta de transparencia, en el sentido que habría intentado alterar su hoja de vida para ganarse el concurso.
Rumores sobre tutelas
Otro rumor relacionado con la Rama Judicial que preocupa a la ciudadanía en Montería es la presunta venta de tutelas, ojalá esta habladuría como se dice en la zona, sobre este posible delito no se vuelva una realidad como el tema de los carros.
Extraña circular tapando el caso en la Rama Judicial
Lo raro del caso de los automotores hurtados es que Alfonso De La Espriella emitió una circular en la Administración Judicial de Córdoba que él dirige, prohibiéndoles a los funcionarios bajo su mando, hablar, recibir quejas, denuncias o peticiones sobre el espinoso tema, todo debe ser canalizado por el correo del Director de la entidad, o sea, su oficina… ¿Qué quiere ocultar al respecto? ¿Existe algún temor?
Es decir, se pierden los vehículos y nadie puede dar ninguna información a los perjudicados, una clara violación de sus derechos como ciudadanos.
Por lo pronto, Alfonso De La Espriella debe solucionar el inmenso enerdo jurídico de los carros que dejó robar en sus narices en Montería o salir del cargo y afrontar decenas de demandas de los propietariso damnificados por esos bienes perdidos que seguramente serán entabladas contra el Estado, pero que deberían repetirse contra este ineficiente servidor público como responsable directo.
