– Para el desplazamiento de los participantes se habilitaron rutas de transporte que garantizan la llegada y la salida de los niños desde y hacia el centro infantil.
En espacios más amplios y con zonas verdes, salas de desarrollo y juegos en óptimas condiciones, 180 niños y niñas de Buen Comienzo continuaron recibiendo atención, luego de que se hiciera efectivo su tránsito a una nueva sede y de que sus anteriores centros infantiles fueran cerrados ya que eran lugares muy pequeños para la prestación del servicio.
Se trata de los beneficiarios de los centros infantiles La Libertad y Ocho de Marzo, ubicados en la comuna 8-Villa Hermosa, que, con el inicio de la estrategia de transformación de infraestructura, transitaron a otras instalaciones, a las que, además, llegan gracias a la habilitación de rutas de transporte que garantizan la salida de sus casas y el arribo al centro infantil.
“Esto hace parte de este proceso que venimos adelantando en diferentes sectores de la ciudad y que busca la transformación de la infraestructura para la prestación del servicio, además de garantizar, en este caso, el transporte para los niños y niñas que necesitan ser atendidos en mejores condiciones. Le apostamos a la transformación de Buen Comienzo en aras de una mejor prestación del servicio y mayores garantías de derechos para la primera infancia”, explicó el director de la Unidad Administrativa Especial Buen Comienzo, Hugo Díaz.
El nuevo espacio es el centro infantil Villa Liliam, en el barrio Caicedo. Allí, los participantes disfrutan de áreas amplias y cómodas, zonas verdes y salas de desarrollo, que estimulan sus capacidades y que son fundamentales para la realización de las experiencias pedagógicas y la promoción de sus derechos.
“El cambio de sede fue súper importante porque las condiciones son increíbles. Es mucho el cambio. Allá tienen todos los espacios necesarios para el aprendizaje y la creación. Mi hija está súper feliz y le encanta”, dijo Rosemery Alejandra Pérez, madre de una niña beneficiaria.
Los agentes educativos y el personal de los centros infantiles La Libertad y Ocho de Marzo también fueron reubicados en Villa Liliam, para dar continuidad a los ciclos de aprendizaje y al reconocimiento de los participantes de su entorno protector.
“El tránsito para los niños y las niñas ha sido muy positivo, muy agradable; igualmente para nosotros como agentes educativos. Los espacios son maravillosos. Esa capacidad de asombro de los niños se multiplicó al llegar a este lugar. Están felices en las nuevas salas de desarrollo. El cambio ha sido muy positivo”, afirmó Beatriz Moncada, agente educativa.
Con la llegada de estos 180 niños y niñas, Villa Liliam completó una matrícula de 420 participantes, convirtiéndose en uno de los centros infantiles con mayor capacidad para la atención en Buen Comienzo.