«Tengo un gran compromiso con mi ciudad, con Bogotá, que está muy necesitada de recuperar la salud, la seguridad y volver a retomar las libertades».
Por Ricardo Angoso.
El hispanocolombiano Gitanillo de América es, quizá junto con su amigo César Rincón, uno de los toreros más conocidos de Colombia. Es un hombre afable, tranquilo, modesto, sencillo, abierto y siempre dispuesto a ayudar a quien se lo pida, tal como pueden avalar todos sus amigos y conocidos. Ahora, tras haber estado dudando algún tiempo, ha decidido dar el salto desde los ruedos taurinos al tablero político, donde quizá se dan más cornadas que en una corrida de toros.
Se declara uribista sin mácula de duda y firmemente comprometido con Bogotá. ¿Por que ha decidido presentarse cómo candidato al Consejo de Bogotá? ¿Qué propuestas e ideas tiene? ¿Qué puede ofrecer un torero a la política bogotana? De todas estas cuestiones, y de algunas más, nos habla en esta entrevista que ofrecemos a continuación para laotracara.co
Ricardo Angoso: ¿Por qué este salto desde el ruedo taurino a la política?
Gitanillo de América: Es un gran reto que tengo con todo lo que me ha dado la vida y también con Dios, al que le agradezco todo lo que me dio en esta existencia. También tengo un compromiso como ciudadano con mi ciudad, que es Bogotá, para defender las necesidades que tiene la urbe, muy necesitada de salud, seguridad y de las grandes libertades que demandamos todos los seres humanos y, por supuesto, los bogotanos.
R.A.: ¿Qué ideas aportarías, por ejemplo, para sacar al centro de la ciudad de Bogotá de su actual estado de postración?
G.A.: Hay que cumplir lo que se dice en las campañas y yo quiero ser un fiscalizador de las promesas que hacen los candidatos antes de ser electos como alcaldes, para que los ciudadanos no sean engañados y se sientan como tales. Las obras, los proyectos prometidos, deben ejecutarse y no se debe mentir a la ciudad. Creo, sin embargo, que tenemos suerte porque el Centro Democrático junto con otras fuerzas están apoyando a un gran candidato, que es Miguel Uribe, y que cada vez tiene más fuerzas y apoyos para ser un gran alcalde. El actual alcalde de la ciudad, Peñalosa, ha demostrado no ser un gran gestor ni ser un gran experto en urbanismo como se presentaba antes de las elecciones. No le he dado cumplimiento a las promesas que hizo antes y después de llegar a la alcaldía, no estuvo a la altura de las demandas de los ciudadanos.
R.A.: Como torero, me imagino, estaras comprometido en la defensa de la tauromaquía, del arte de los toros, ¿no?
G.A.: Yo he trabajado en unión de algunos legisladores amigos y cercanos a mí para sacar adelante varios proyectos legislativos que van en la línea de lo que ha dicho la Corte Constitucional de Colombia en diez fallos a favor de defender las tradiciones taurinas y nuestra gran fiesta de los toros, que es una fiesta colombiana y que tiene ver mucho con nuestra identidad. El toro de lidia ha nacido para la fiesta, está constituido para desarrollarse en ese hábitat y está en relación con la fiesta brava, es algo que no tiene discusión. Si acabamos con la fiesta brava, como pretenden algunos, se extinguirá la especie y el toro bravo. Aparte del daño económico que significaría en Colombia acabar con casi ochenta ganaderos que tienen unas dehesas y centenares de trabajadores, que llevan años defendiendo sus fincas, y que ahora por una errónea decisión, como sería acabar con la fiesta de los toros, verían quebrados para siempre sus negocios a los que les dedicaron toda su vida. El anterior alcalde de la capital, Petro, por ejemplo, se saltó todas las decisiones de la Corte Constitucional y cerró, de una forma arbitraria, la plaza de toros de Bogotá, dejando a miles de personas sin trabajo, en un hecho injusto e ilegal, claramente.
«La seguridad ciudadana es importante pero también es un motivo de preocupación y un objetivo de mi campaña es la salud de todos los bogotanos».
Yo he trabajado mucho en los últimos años por recuperar las instituciones taurinas y todos los negocios y servicios ligados a la gran fiesta de los toros, como por ejemplo, los restaurantes que están alrededor de la plaza de toros de Bogotá, que han vuelto a recuperar su actividad y a trabajar nuevamente sin trabas ni prohibiciones. Además de todas estas consideraciones, quiero reseñar que la plaza de toros de Bogotá le entrega a la ciudad grandes dividendos económicos cifrados en más de 2300 millones de pesos -casi 750.000 dólares- y es un motor para la ciudad y su desarrollo en todos lo sentidos. No hay ningún espectáculo, de ningún género, que deje esos dividendos a la ciudad. Nosotros generamos riqueza al tiempo que fortalecemos y conservamos una parte de nuestra cultura que preservamos para las futuras generaciones y no la dejamos perder en el olvido. Nuestra historia está en nuestras manos y tenemos que ser nosotros mismos quienes las preservemos.
R.A.: ¿Qué puede aportar un torero a la política colombiana?
G.A.: Muchísimo. Nosotros hemos vivido muy intensamente y hemos pasado a través de nuestra vida por numerosas vicisitudes, ya que nuestra escuela de la vida es la calle. Viajamos, conocemos, tenemos muchas experiencias en nuestra vida, el trato con la gente, viajar a otros países, hablar siempre con la gente de la calle, somos hombres en todo el sentido de la palabra y formamos parte de la sociedad, conociendo bien a la misma y queriendo servirla con integridad y sacrificio. Vivimos a tope con el acelerador puesto. Los toreros queremos darle grandeza a la fiesta de los toros pero también tenemos nuestro compromiso con la sociedad. La fiesta taurina se acabará solamente cuando la gente deje de ir a las plazas de toros, tal como lo dijo ese gran maestro de la literatura que fue Gabriel García Marquez.
R.A.: ¿Por qué elegiste a Uribe y al Centro Democrático para ir a las elecciones?
G.A.: Porque soy claramente uribista. Porque sé que Uribe es el presidente que más le ha dado a Colombia y porque ha sido nuestro mejor presidente de la historia, sin lugar a dudas. Lo digo y lo pienso. Uribe fue el presidente que nos dio la libertad de poder andar por el país con seguridad y y ahora hay mucha gente que se olvida de ese aspecto fundamental de la vida. Porque Uribe es hombre sincero y honesto que le han querido inventar mil y una mentiras, pero, a pesar de todos sus enemigos y vilezas, siempre ha salido indemne. Cuando una persona consigue salir de todas esas trampas y falsedades es porque la mano de Dios está sobre él, sin ningún género de dudas lo digo. También tengo que estar muy agradecido al partido Centro Democrático, que ahora represento y del que estoy orgulloso de ser su candidato al Concejo de Bogotá. Somos un gran país, Colombia nos necesita, y todos tenemos que estar dispuestos a trabajar por la patria y sacar adelante a nuestra amada Bogotá. Y de la mano de nuestro presidente, mi querido Alvaro Uribe Vélez, lo vamos a conseguir. Finalmente, solamente decirte que con Gitanillo todo es más sencillo.