Por: Eduardo Padilla Hernández, profesor de Derecho Ambiental.
Hace muchos meses, en una de mis columnas, dije que veía tres candidatos opcionados para ser Presidente de Colombia: Gustavo Petro, Germán Vargas Lleras y Rodolfo Hernández.
Hoy podemos observar que dos de ellos están luchando por llegar a la Presidencia de la República.
Eso significa que no se requiere ser clarividente para saber quién va a ser el próximo Mandatario nacioanl.
Esa vez me referí a Gustavo Petro, porque él venía liderando las encuestas que lo beneficiaban desde hace aproximadamente un año, con una propuesta contraria a lo que les daba el establecimiento a los colombianos.
Hoy, con sorpresa, veo que Gustavo Petro se volvió el candidato del establecimiento, pues muchos políticos bandidos de los distintos departamentos, principalmente de Córdoba, lo están apoyando, como Zulema Jattín, Fabio Amín y los Besaile.
Quienes creemos en los principios morales, en la lucha contra la corrupción, en qué hay que cambiar al país, no debemos apoyar a la clase política tradicional que busca prolongarse y permanecer en el poder.
Esa clase política vetusta es ahora liderada por Gustavo Petro. Todo esto es razón suficiente por lo que es imposible que un hombre como yo que ha combatido de frente con más de 50 denuncias contra los distintos gobernadores de Córdoba, de otros departamentos del país y contra los diferentes políticos de la región que han hecho sufrir a la niñez en el tema de salud y educación.
Por todos estos motivos no se puede acompañar a ese cúmulo de personajes corruptos que tanto daño le causan a la sociedad.
Pero, por fortuna, desde hace aproximadamente un año venimos acompañando al ingeniero Rodolfo Hernández, con el cual me he reunido en varias oportunidades en Bucaramanga y Bogotá, porque realmente estoy convencido de que él será el próximo presidente, pues, según las encuestas, ya se alcanzó a Gustavo Petro.
Yo considero que con su propuesta transparente: “no mentir, no robar, no traicionar”, Rodolfo denota el accionar del país que está esperando un cambio, afincando su esperanza y su gratitud ante Dios y ante la sociedad que tiene como instrumento de cambio a un hombre adulto que ha demostrado la madurez y la solvencia financiera suficiente, por cuya razón no necesita robarse el dinero de los colombianos para subsistir ni para pagar su campaña política.
Es por eso que los colombianos debemos rodearlo y darle la oportunidad de ser presidente durante los próximos cuatro años de gobierno, porque el ingeniero Rodolfo Hernández, a pesar de que está exponiendo su vida, tiene una convicción de que el país se puede cambiar por una vía distinta a la de las armas.
La otra campaña miente cuando afirma que Rodolfo Hernández está imputado ante la Fiscalía y ante el Juzgado 16 Civil Municipal de Bucaramanga.
Acerca de esta falacia, el candidato destacó que se trata de una nueva forma para tratar de frenar el crecimiento de su candidatura.
Añadió que él está seguro de que nada afectará su camino a la Presidencia.
