Por: mario arias gómez.
N
iñas de la Rosa Blanca (Libardo Narváez Ortiz)
https://www.youtube.com/watch?v=0VxsZj_imvA
Censurable, imperdonable, inaceptable, incalificable, inconcebible, inexcusable, injustificable, ominosa, repugnante y vergonzosa realidad; se agotan los adjetivos, apelativos, calificativos, para condenar, rehusar, rechazar esta abominable, afrentosa, aflictiva, bochornosa, cobarde, crujiente, degradante, despreciable, encogida, ignominiosa, inescrupulosa, infamante, inmoral, nefanda, obscena, pudibunda, repulsiva y vergonzosa certeza: Las violaciones a niñas y jovencitas menores, raptadas, secuestradas, incapaces de resistir, plantar cara.
Crueles, inicuos e irracionales acciones, consumadas por animales salvajes, bárbaras bestias inhumanas, que nadie -hasta ahora- pudo, puede, ni podrá absolver, indultar, olvidar, perdonar, ni podrán hacerlo, jamás, en un futuro.
Pecados. Deudas. Escándalos. Excesos. Culpabilidades. Maldades. Perversiones -llámense como se llamen-, delitos de ‘lesa humanidad’, que sin conmiseración claman venganza al cielo.
Bogotá, D. C. 12 de mayo de 2019