Luis Fernando Espinosa llegó a la Presidencia de la Cruz Roja de Boyacá en mayo de 2015, según su propio perfil en la red social Linkedin, pero fue condenado por estafa el 4 de mayo de 2018 en el Juzgado 12 Penal del Circuito de Cali. Ahora tiene tres fallos en contra por ese delito, ya que la Corte Suprema acaba de ratificar su sentencia, y sigue en el cargo.
Por Sixto Alfredo Pinto.
La Cruz Roja Colombiana es una de las entidades más queridas y respetadas en el país, pero, al parecer, ni ese organismo supuestamente altruista se ha salvado de presuntos malos manejos por parte de sus dirigentes y la corrupción que corroe al país.
Hay muchas quejas de funcionarios y exempleados de esa entidad sobre una supuesta burocracia desbordada por cuestiones de amiguismo por parte de algunos jefes y hasta presuntos despilfaros de los recursos públicos que le llegan a la Cruz Roja. Todos esos cuestionamientos y prometen convertirse en grandes escándalos venideros.
Un caso, no menor, que empaña su imagen es el de la Cruz Roja seccional Boyacá, que está siendo dirigida en el actualidad por un personaje condenado por estafa. Es decir, un «estafador» preside la entidad en este lindo departamento del centro de Colombia.
Se trata de Luis Francisco Espinosa Sánchez, quien llegó a la Cruz Roja de Boyacá en mayo de 2015, según él mismo confirma en su perfil de la red social dedicada a la busca de empleo Linkedin, donde este ratifica que lleva 8 años en la entidad.
Resulta que el 4 de mayo del año 2018 el Juzgado 12 Penal del Circuito de Cali condenó a Luis Francisco Espinosa Sánchez y a otros dos personas de su círculo de trabajo en ese entonces como «coautores responsables del delito de estafa agravada, en concurso homogéneo».
La sentencia sostiene que el grupo empresarial PROCAMPO conformado por las empresas PROAGRO LTDA, ANDINAGRO S.A, AGROVILLALGO LTDA y la compañía QUIMOR S.A, representadas y dirigidas por los señores Luis Francisco Espinosa Sánchez, Jairo Humberto Quijano Ramírez, Ramiro José Villalobos González, Antonio José Carvajal Coll, defraudaron el patrimonio económico de la sociedad INVERCAPITAL S.A. Las operaciones consistieron en la compra con pacto de recompra de unas facturas cambiarias de compraventa.
Espinosa fue condenado a una pena de 32 meses de prisión y una multa de 66.66 salarios mínimos legales mensuales vigentes, para el momento de la comisión del hecho en el 2004. Además lo sentenció, al pago solidario con los otros condenados, de casi $1.000 millones a favor de Invercapital S.A. por los perjuicios materiales.
Ese fallo condenatorio fue ratificado por la Sala Penal del Tribunal Superior de Cali el pasado 4 de septiembre 2020. O sea, intentó tumbar la sentencia en su contra, pero no pudo y se la ratificaron. Pero lo curioso es que ya dirigía la Cruz Roja de Boyacá y, condenado y todo, siguió en el cargo. Supuestamente ocultando el gravísimo hecho penal a las directivas de la entidad, porque nunca hubo un pronunciamiento al respecto. O en caso contrario, si lo sabían, el asunto es más criticable porque tampoco hubo una versión oficial pidiendo su dimisión y prefirieron apoyarlo secretamente y callar el tema.
Pero el tema va más allá. Espinosa en su afán de tumbar su condena interpone a su favor un recurso válido de Casación ante la Corte Suprema de Justicia, alegando la inocencia.
Sin embargo la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia el 23 de junio del año 2021, reiteró la sentencia. Es decir tiene una condena por estafa en firme, pero sigue siendo el Presidente de la Cruz Roja de Boyacá sin inmutarse. Con esto tiene tres fallos en contra, pero nadie lo mueve de su codiciado puesto. Vea el Fallo completo de CASACIÓN 58802 (AP2537-2021) de la Corte contra Luis Francisco Espinosa.
El certificado de Antecedentes de la Procuraduría General de la Nación reciente, del 7 de marzo de 2023, confirma las tres decisiones en contra del señor Espinosa y hasta se nombra su inhabilidad para contratar con el Estado por su condena. Miren…
Ahora Espinosa se mueve otra vez y contrata a dos prestigiosas, reputadas y costosas firmas como lo son Brigard Urrutia Abogados S.A.S y Calvete Abogados para que esta última interponga a su nombre un denuncia contra el Estado colombiano ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) con sede en Washington (Estados Unidos), por considerar que las justicia nacional le vulneró sus derechos, un caso que puede tardar años en resolverse, pero él no se ha apartado del cargo y sigue dirigiendo, condenado, a la Cruz Roja de Boyacá.
¿Cuánto le pagó Espinosa a estos bufetes de reconocidos juristas por su defensa?
Hay que aclarar que Espinosa supuestamente no tiene sueldo como Presidente de la Cruz Roja de Boyacá porque es una labor voluntaria. ¿Entonces de dónde sacó los recursos para contratar a las más encumbradas oficinas de abogados del país que, inclusive, ni con su gran fama pudieron tumbar su sentencia en la Corte Suprema?
La Presidenta nacional de la Cruz Roja Colombiana, Judith Carvajal de Álvarez, que está en el cargo desde el 2017, debería entregar su versión de este espinoso caso y fijar su posición y la de la entidad que representa al respecto. Aunque no se debe olvidar que en la misma Cruz Roja se dice que Espinosa es hombre de confianza de Álvarez y este siempre ha recibido todo el respaldo de la alta ejectiva.
Informaciones desde la misma entidad humanitaria indican que Espinosa supuestamente pretendía ser miembro de la Junta Directiva de la Cruz Roja Colombia (el nivel central) cargos que se elegirán el próximo 26 de abril de 2023, pero al quedar descubiertos sus antecedentes penales prácticamente quedó descartado en sus aspiraciones.