El presidente Gustavo Petro Urrego anunció que en su mandato haría lo posible por conseguir la paz total para Colombia, así tuviera que dialogar con todos y cada uno de los grupos armados ilegales que llenan a nuestro país día a día con violencia.
El Canciller Álvaro Leyva ya está encargado de enderezar y hacer funcionar los diálogos con los renuentes cabecillas del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que se encuentran refugiados en Cuba. Acercamiento que originó el levantamiento de las órdenes de captura internacionales contra estos jefes guerrilleros que ahora vuelven a su rol de negociadores de paz. Al ELN se le reconoce ya como un actor político. A las llamadas bandas criminales no, pero se buscará hacer la paz también con ellos.
Sin dejar de contar, la suspensión de los campamentos guerrilleros porque puede haber allí niños recutados o integrantes voluntarios de la subversión. Además el fin de la erradicación de la fumigación de las plantaciones de coca con el químico Glifosato y el reconocimiento a los cultivadores de coca. También, el final de la extradición para subversivos, narcotraficantes o delincuentes hacia Estados Unidos y otros países si confiesan en Colombia sus crímenes.
Hay más, porque el Gobierno anunció un cese del fuego unilateral por parte de las Fuerzas Armadas colombianas como muestra de confianza especialmente para el ELN y el Clan del Golfo, con el fin de sentarlo a negociar. Se habla de zonas de Ubicación Temporal en sitios rurales del país para negociar con los grupos armados, más de 30 organizaciones delincuenciales, para que se puedan desmovilizar y negociar.
Pero lo que más ha impactado de esta «Paz Total» es el anuncio del Gobierno mediante su Ministro del Interior y del propio Mandatario Gustavo Petro de darle el poder a los Alcaldes del país para que manejen a las Fuerzas Militares en sus poblaciones, lo cual constitucionalmente le corresponde es al Presidente de la República.
“Queremos dotar de funciones a los alcaldes para que sean jefes del orden público”, dijo el MinInterior Alfonso Prada en los medios de comunicación.
Para Petro los alcaldes serán los responsables de convocar los Puestos de Mando Unificado (PMU) y contribuir a la paz en sus territorios. Se habla de 65 municipios o pueblos con los que se comenzaría este plan por su alto índice de violencia.
“Los alcaldes convocan las instituciones que haya en el lugar y básicamente porque estamos hablando de violencia, la Policía, el Ejército y las otras Fuerzas Militares deberán obedecer a los alcaldes y se implementará lo que dice la Constitución, donde estipula que el alcalde es el jefe de la Policía y los puede convocar a trabajar por el bienestar de la comunidad”, explicó el nuevo Jefe de Estado Petro.
Por su parte Prada explicó: “La orden del presidente es que el alcalde cuente con el apoyo de las Fuerzas Militares y de Policía para proteger en el instante la vida de las personas. Un Puesto de Mando Unificado, coordinado desde aquí, desde el Ministerio del Interior, que pretenda tener presencia inmediata para la protección de vidas en el territorio es imposible. Por eso debemos tener a los alcaldes para que coordinen medidas inmediatas”.
El Gobierno puso sus cartas en la mesa y comenzó entregando todo lo que estaba a su alcance, por ahora, para que haya excusas para hacer diálogos de paz.
El proyecto de Ley de Orden Público, con la «Paz total» del petrismo incluida, como política de Estado, ya está en el Congreso de la República para sus debates y su respectiva aprobación para que quede en la legalidad esta iniciativa de Petro.
Se habla de un gabinete de Paz para que en cada Ministerio se tenga en su sector dedicado al manejo del tema. De igual menera, se establecerán unos diez Comisionados de Paz regionales para hablar con los grupos delincuenciales sobre temas humanitarios en las zonas con más violencia del país como Cauca, Nariño, Norte de Santader, Chocó, Valle, Arauca, etc.
Como dijimos, el Gobierno Petro está poniendo todas sus herramientas en juego lo está dando todo para lograr ese esquiva paz en Colombia.
