Antioquia, Chocó, Cauca y Nariño se ubican lamentablemente como los departamentos que registraron mayor cantidad de menores reclutados y atendidos en el ICBF. Hoy preocupan los menores indígenas, afros y ubicados en zonas fronterizas.
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, y Unicef Colombia presentaron el estudio «Caracterización de la niñez desvinculada de grupos armados organizados al margen de la ley (2013-2022)». De acuerdo con las entidades, 2181 víctimas de este delito fueron atendidas en este periodo, una cifra alarmante.
El documento alerta sobre tres nuevas prácticas que hoy son la mayor preocupación de las autoridades. Se trata del reclutamiento de niñas y mujeres adolescentes integrantes de comunidades étnicas y menores del extranjero.
“Entre sus principales hallazgos, el estudio registra un aumento en el ingreso al programa de desvinculados de niñas, niños y adolescentes de comunidades étnicas, pasando de un 14 % a un 34 % en población indígena y de un 12 % a un 17 % en población afrocolombiana”, manifestó en la cuenta de Twitter, Astrid Cáceres, directora del ICBF.
Es evidente el incremento en un lapso de nueve años, del reclutamiento de menores de resguardos indígenas y afrocolombianas.
Se indica que “al revisar la atención del programa del ICBF para el mes de agosto de 2022, de los 196 casos atendidos para ese momento, el 51,5 por ciento correspondía a menores con pertenencia étnica”. Esto, de acuerdo con el informe, responde a que los ámbitos comunitarios y de reproducción cultural de las personas con pertenencia étnica se encuentran constantemente amenazados por las dinámicas del conflicto armado.
De los 2182 niños que hacen parte del análisis, 750, es decir, el 34 % son mujeres, mientras que hombres suman 1431. No obstante, para este periodo se evidencia un crecimiento en relación con las mujeres de acuerdo con estudios anteriores, específicamente en los años 2007 y 2013.
De acuerdo con el ICBF, la edad promedio de reclutamiento de las niñas y mujeres adolescentes es de 13,8 años; quienes según los relatos del análisis se convirtieron en objetos de deseo, dominio o recompensa al interior de estos grupos.
El estudio también indica que hay una marcada violencia basada en género en ocasiones las agresiones inician en casa con su familia, lo que las lleva a experimentar en estructurar ilegales, siendo víctimas de abuso, acoso, entre otras formas de violencia sexual.
Crudas cifras
El estudio indica que de las 2181 víctimas atendidas por el ICBF atendidas durante el periodo de análisis, el 40.2 % es decir, 877 fueron reclutados por las Farc mientras que el ELN reclutó 587, es decir, 26.9 %. Lo paradójico, es que esta guerrilla que sigue en la mesa de negociaciones propuesta por el Presidente de Colombia, Gustavo Petro Urrego, niega que reclute menores.
A las disidencias, el ‘Estado Mayor Central’ y la ‘Segunda Marquetalia’, se les atribuyen 406 casos, es decir, 18,6 % Por su parte, el ‘Clan del Golfo’ sumó a sus filas al menos a 118 menores, lo que representa el 5,4 %.
Según la información recolectada, los menores son reclutados en promedio 21 meses y desarrollan actividades relacionadas con apoyo logístico, mantenimiento, cocina y supervivencia de las tropas.
Los departamentos que registraron la mayor cantidad de menores reclutados y atendidos en el Icbf fueron Antioquia, Chocó, Cauca y Nariño.
Extranjeros
El estudio reveló también que los menores ubicados en zonas de frontera también son vulnerables. Según los registros, 35 casos de niños provenientes de Venezuela, dos de Ecuador y dos de Panamá identificó el Sistema de información del Programa dentro de sus ingresos por desvinculación.
“En comparación con el estudio de caracterización realizado para los años 2007-2013, esto representa un aumento importante al pasar de 7 a 39 casos”. Y aclaran que ninguno de los menores fue incorporado en su país, sino cuando ya se encontraban en territorio colombiano.