Por mario arias gómez.
E
stamos rodeados de virus, bacterias y microorganismos que, por fortuna, no suelen causarnos grandes problemas para la salud. Sabemos que los gérmenes son residentes habituales de billetes, celulares, teclados y otros objetos cotidianos que, por ende, tendemos a limpiar con cierta frecuencia o usar con cuidado. Hay objetos de nuestro día a día, que pasan más desapercibidos ante nuestros ojos y ante los trapos de quienes los limpian. Patógenos como la escherichia coli y la salmonella, potencialmente letales. La gran mayoría de bacterias, virus y otros microbios que nos encontramos a diario, tienden a ser inofensivos para nuestra salud o contagiar infecciones leves o diarreas, que algunos dirán que nos hacen más fuertes.
Estos son algunos de los lugares más contaminados: El transporte público, en razón a que entramos en contacto con muchas más personas y sus correspondientes gérmenes. Los botones del ascensor. La sala de descanso, o zona de la cafetera, las llaves del caño del lavamanos y el asa de la puerta del microondas.
La mayoría de los bolsos y billeteras no se lavan y la gente suele utilizarlos durante varios años hasta que los tira. Normalmente se guardan o se apoyan en ambientes llenos de bacterias, como mesas de cocina, bolsos, superficies del baño y sobre los mostradores de restaurantes de comida rápida. Los monederos sintéticos tienen una mayor contaminación bacteriana que los de otros materiales, como cuero o tela.
Muchos supermercados limpian regularmente con desinfectante sus instalaciones, pero no los carritos de compra. Un estudio encontró la bacteria Escherichia coli, más conocida como E.coli, en la barra de la mitad de los carritos de la compra analizados. Bacteria asociada a la materia fecal de animales y humanos y puede causar infecciones gastrointestinales graves.
Bogotá, D. C. 06 de abril de 2019
