La actual concejal de Bogotá por el partido Liberal, María Victoria Vargas, quiere repetir en el cabildo distrital para seguir poniendo en cintura a la corrupción, el despilfarro y los malos manejos de los recursos públicos en la Capital.
Está catalogada como una de las tres mejores concejales bogotanas, por la ONG Concejo Cómo Vamos y fue quien sacó la cara por la mujer en la política local.
La aguerrida concejal liberal fue la primera que en el 2002 denunció ante la Fiscalía General de la Nación los vínculos de los empresarios Nule, condenados por el célebre «carrusel» de contratos de Bogotá, con la Administración Distrital.
Esta líder bogotana destapó en el 2014 toda la contratación irregular de la máquina TapaHuecos y propuso moción de censura contra el Secretario de Movilidad y la Directora de Malla Vial del Distrito, quienes hoy son procesados por la Fiscalía.
También descubrió, entre otros, los malos manejos en el Acueducto de Bogotá (EAB) y la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá (ETB), además de todas las irregularidades en la famosa Línea 123 manejada por el Fondo de Vigilancia, la cual sirve para reportar las emergencias en la ciudad. El gerente del citado Fondo tuvo que renunciar absorbido por el escándalo y culpó de la corrupción en esa entidad pública al mismo Alcalde de la Capital, Gustavo Petro Urrego, quien ahora tiene a cuestas un proceso disciplinario por este hecho en la Procuraduría General.
Todos estas anomalías en la administración del saliente burgomaestre de Bogotá fueron conocidas en Colombia por las denuncias de Vargas en los medios de comunicación y luego sus respectivos debates de control político en el Concejo local.
Vargas, una mujer seria y de carácter, tiene en número 2 en el Tarjetón Liberal y espera que los capitalinos premien su destacada y visible labor en pro de la ciudad.